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El Senado de la Nación convirtió en ley un proyecto que declara al vino argentino como “bebida nacional”. El vino ya había sido declarado en 2010, por decreto presidencial, “bebida nacional”, pero sin una ley que lo avalara, por lo que la aprobación de la norma por unanimidad del Senado significará dar impulso al Plan Estratégico Vitivinícola 2020, para promocionarlo en todo el mundo.
Argentina, donde se consumen 29 litros de vino per capita anualmente y hay 948 bodegas elaboradoras, es el quinto productor mundial de esta bebida detrás de Italia, Francia, España y Estados Unidos, y es el undécimo exportador en el mundo.
En la misma sesión, los 47 legisladores presentes aprobaron otra ley que declara al mate como “infusión nacional”. El texto de la ley define al mate como “la infusión preparada en base al alimento de yerba mate, que colocada en un recipiente y mojada con agua caliente, es bebida mediante una bombilla”.
De esta manera, el Gobierno nacional elaborará un plan de acción para difundir las características culturales que impliquen la producción, elaboración y consumo de vino argentino y sus tradiciones, así como la promoción de la imagen y el logo del vino argentino en todo tipo de eventos oficiales en el país y en el exterior. Se buscará asegurar la presencia del vino argentino en eventos oficiales del cuerpo diplomático y consular.
También se establecerá que el logo del vino argentino sea incorporado en la etiqueta de las botellas que contengan esa bebida de producción nacional.
Asimismo, se promoverá el desarrollo de las economías regionales a partir de acciones relacionadas con actividades de servicios vinculadas al sector vitivinícola.
Por último, se promoverán los estudios y las organizaciones tendientes a la definición de las distintas regiones y subregiones vitivinícolas de cada provincia.
“Este hecho nos permitirá difundir de manera unívoca y uniforme las características culturales que implican la producción, elaboración y consumo de vino, alcanzando a toda la cadena vitivinícola y a todos los productos de esta actividad, y a las fuertes tradiciones de la cultura y el trabajo de las viñas”, señaló el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), que reúne gobiernos de provincias productoras y cámaras empresarias del sector.