Alfonso Prat Gay dejó hace tiempo el ministerio de Economía pero no se alejó del tema. Todo lo contrario: el exfuncionario sigue de cerca la política monetaria de Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central. Y por eso no dudó en disparar contra sus medidas anti-inflacionarias.
inicia sesión o regístrate.
Alfonso Prat Gay dejó hace tiempo el ministerio de Economía pero no se alejó del tema. Todo lo contrario: el exfuncionario sigue de cerca la política monetaria de Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central. Y por eso no dudó en disparar contra sus medidas anti-inflacionarias.
“Uno mira el mensaje que manda el Banco Central y no es suficientemente claro”, empezó diciendo Prat Gay, para luego deslizar que esta es “una de las razones por las cuales la inflación dejó de bajar”. El exministro criticó el déficit de cuenta corriente y sostuvo que es “el más alto de los últimos 10 años, ya que equivale a 4 puntos del PBI”.
Prat Gay también aseguró que “el esquema de metas de inflación es un problema cuando se lo pone por delante de los objetivos que busca” y le pidió al Central ser más “flexible” al referirse a la política trazada para mantener los precios bajos. “El Banco Central está operando como si en el presupuesto no se hubiera corregido las metas fiscales”, aseveró.
“Todo el entusiasmo que hay por Cambiemos debe ser ratificado por una buena micro y una buena macro”, agregó el economista quien alertó sobre la necesidad de revisar ciertas variables.
Cabe recordar que, la semana pasada, el Central subió un punto básico la tasa de interés de referencia, que pasó de 27,75 a 28,75 por ciento, con el objetivo de mantener bajo control la inflación. Esa situación provocó que el dólar bajara.
La fiebre por las Lebacs y otras definiciones
Prat Gay también se refirió a las Letras en pesos del Banco Central (Lebacs), y señaló que como inversión son “tremendamente atractivas” y que la señal de alerta pasa por “el nivel de stock acumulado hasta la fecha”.
Mientras tanto, sobre el impuesto a la renta financiera, una de las novedades que incluye el proyecto de reforma impositiva impulsado por el Gobierno, sostuvo que “este esquema existe en todos los países del mundo” y que la alícuota prevista es “menos de la mitad de lo que se grava cualquier otra renta”.