En plena campaña de descacharrado para controlar la proliferación de mosquitos, que pueden transmitir dengue, zika y chikungunya, dos calles de la zona sudeste de Salta Capital parecen lagunas por la cantidad de agua que quedó estancada en ellas. Los vecinos reclaman al municipio que las tape porque es notable cómo aumentó la cantidad de mosquitos.
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En plena campaña de descacharrado para controlar la proliferación de mosquitos, que pueden transmitir dengue, zika y chikungunya, dos calles de la zona sudeste de Salta Capital parecen lagunas por la cantidad de agua que quedó estancada en ellas. Los vecinos reclaman al municipio que las tape porque es notable cómo aumentó la cantidad de mosquitos.
En octubre comenzaron los trabajos de apertura de calles pero, por un problema administrativo, la comuna dejó de recibir fondos. Esto frenó las obras y dos cuadras quedaron abiertas.
Con la llegada de las lluvias, las zanjas se transformaron en piletas y algunos vecinos aprovecharon para tirar escombros y restos de poda. Las altas temperaturas propiciaron la aparición de insectos y animales: grillos, cucarachas, ranas y ratas.
Desde la Municipalidad aseguraron a El Tribuno que ya se resolvió el problema administrativo y que esas calles van a ser pavimentadas.
Situación de los vecinos
"Dijeron que iban a asfaltar, removieron la tierra, dejaron así nomás y la gente está tirando basura", dijo Isabel Yapur a El Tribuno. "Fuimos a la Municipalidad pero no nos dan bolilla. Dijeron que dentro de 15 días vendrían pero no vinieron más. Antes había ripio bien lindo. Ahora, cuando llueve, se llena de agua y desborda por las calles", advirtió.
Juana Segura comentó que los niños sufren con las picaduras de zancudos y que, cuando llueve, los sapos brincan por todas partes. "Es un desastre", observó. "Antes de las elecciones dijeron que lo iban a hacer. El otro día me pidieron que sacara las cosas por el dengue pero yo les dije: ¿para qué voy a sacar las cosas, si ahí está el dengue?", dijo y señaló la "laguna". "Yo quiero que hagan algo. Si no lo pueden asfaltar, por lo menos que lo enripien, como estaba antes".
Francisco Agolio, subsecretario de Inspecciones y Certificaciones de la Municipalidad, aseguró a este medio que el problema administrativo ya se resolvió y que estas cuadras serán pavimentadas.
"Hubo cuestiones administrativas que demoraron un envío de fondos pero ya está solucionado. Esperamos ansiosamente una confirmación de la Nación, que nos dé el visto bueno para retomar", expresó.
"La gestión es ajena. Estamos involucrados porque dependíamos de ese envío de fondos", planteó Agolio. "Era un problema administrativo, no era mala voluntad de Nación", arguyó el funcionario.
La historia de la obra
El trabajo en esta zona empezó en octubre con la apertura de calles y luego seguirían las tareas de pavimento. Entonces comenzaron los problemas administrativos, que frenaron las obras. Como varias calles en la ciudad quedaron abiertas, algunas se arreglaron y otras quedan por recuperar.
Tres barrios sin colectivos
Desde ayer por la mañana el corredor 7 de la empresa Alto Molino dejó de prestar servicios en los barrios Primera Junta, Libertad y Sanidad. Se tomó esta medida de fuerza ante la falta de respuesta al reclamo que hicieron por el mal estado de las calles.
El cuerpo de delegados gremiales afiliados a UTA Salta e integrantes de la agrupación Colectiveros Unidos de Salta (CUS) informaron que los colectivos volverán a recorrer los barrios cuando las calles estén mejor.
Uno de los voceros dijo que desde la Municipalidad se comprometieron ayer a pasar las máquinas. “Van a hacer las canaletas para que corra el agua, esperarán a se seque un poco y luego tirarán ripio para nivelar las calles”, dijeron.
El acceso de las unidades a estos barrios no se permitió desde ayer, a las 8, por el abandono de las calles, que están durante los días de lluvia.