Por Gonzalo Teruel
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Por Gonzalo Teruel
El pasado domingo 14 de enero falleció Gustavo Uldry, dirigente tabacalero salteño, expresidente de la Cámara Regional de la Producción y miembro de la conducción de Federación Agraria Argentina.
Reconocido por su activa lucha por la efectiva aplicación del Fondo Especial del Tabaco, Uldry es recordado por una vehemente defensa de los intereses de los productores del norte del país.
Participó activamente de míticas protestas y “tractorazos” en defensa de los productores tabacaleros y poroteros durante las décadas del 70 y del 80. “Llegó a meterse a los empujones a los despachos del secretario de Agricultura y del propio ministro de Economía durante la presidencia de Raúl Alfonsín”, recordó esta semana al conocer su deceso un agricultor del Valle de Lerma y añadió que “durante la gestión de Carlos Menem, en 1992, también estuvo al pie del cañón y encabezó un histórico tractorazo para reclamar la plata del FET que se quería quedar el Gobierno nacional”.
Uldry era hombre puesto para suceder a Humberto Volando al frente de Federación Agraria en 1997, pero desistió porque no quiso abandonar su campo salteño.
Vehemente pero también creativo, antes y después de la crisis política y económica del año 2001, como titular de la Cámara Regional de la Producción propuso que los ruralistas abonen sus impuestos con alimentos. “Hace años que propongo el pago con cosecha”, celebró en 2002, cuando para paliar la crisis financiera el Gobierno provincial aceptó verduras, huevos, leche, carne, porotos y otros alimentos, como pago de las deudas de los productores en el Impuesto Inmobiliario Rural y el Canon de Riego. Aquella singular experiencia permitió que a cambio de un cheque “no endosable e intransferible”, imputado exclusivamente para abonar los tributos adeudados, los productores entregaran alimentos que fueron destinados a los más de 800 comedores infantiles.
Participó también en las últimas protestas contra el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en 2015.
“A mí me detuvieron y hasta me amenazaron la familia, estuve retenido en los cuarteles del Ejército y en la SIDE, pero no he tenido miedo a nada, porque el que tiene miedo no puede ser dirigente, se tiene que ir a la casa”, expresó hace unos años en el programa “Claves del Campo” que emite Radio Salta y reclamó a los gremialistas “dejar la obsecuencia y trabajar en defensa de los productores”.
“Si no se animan, se tienen que ir”, enfatizó. Así, vehemente y frontal, era Gustavo Uldry.