Una adolescente de 16 años con signos de sobredosis, fue abandonada el sábado por un joven, hasta el lunes detenido, en la guardia de un hospital en Bahía Blanca donde falleció horas más tarde. La joven, identificada como Mariana Bruna, fue llevada a la guardia del hospital Español a primera hora del día sábado por Luis Nicolás Martínez, de 28 años, quien la habría abandonado allí para luego darse a la fuga.
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Una adolescente de 16 años con signos de sobredosis, fue abandonada el sábado por un joven, hasta el lunes detenido, en la guardia de un hospital en Bahía Blanca donde falleció horas más tarde. La joven, identificada como Mariana Bruna, fue llevada a la guardia del hospital Español a primera hora del día sábado por Luis Nicolás Martínez, de 28 años, quien la habría abandonado allí para luego darse a la fuga.
Los primeros informes de autopsia revelaron que la adolescente falleció producto de un edema pulmonar agudo y un shock cardiogénico, producido por una sobredosis. Según se sospecha, el acusado Martínez, luego de pasar la noche con la adolescente y tras haber consumidos drogas, quiso deshacerse de ella dejándola en el hospital.
"Es evidente que se quería deshacer del cuerpo. Le vamos a imputar que la dejó en una situación de desamparo y que no le brindó la asistencia necesaria", dijo el fiscal del caso, Marcelo Romero Jardín, a La Brújula 24.
Según señaló la fiscalía, poco antes de su llegada a la guardia del hospital, a las 4 de la mañana quedó registrada la imagen de Martínez junto con Mariana Bruna saliendo ambos de un cajero automático. La joven no presentaba signos de haber sido violada pero sí de haber mantenido relaciones sexuales esa madrugada.
También trascendió que la joven víctima habría pasado parte de esa madrugada en un inmueble ubicado en Uruguay 51 de Bahía Blanca, el cual sería un departamento alquilado por el director de la Escuela Secundaria 339, identificado como Sebastián Rodríguez Maidana. En el lugar, la Policía Federal secuestró marihuana y otros elementos de interés para la causa.
Tatiana, cuñada de la víctima, dijo en la tarde del lunes que en los últimos tiempos había notado que Mariana "estaba mucho tiempo con el celular y recibía mensajes a cada rato. Cuando yo le preguntaba con quién hablaba, se ponía nerviosa y no quería hablar más", recordó.
Sobre cuál era el plan que la adolescente tenía para la noche en que se sucedieron los hechos que la llevaron a la muerte, Tatiana dijo que la víctima "había comentado que tenía una juntada con amigos. Eran todos conocidos de donde ella estudiaba", dijo la cuñada, quien aseguró que en la familia nadie conocía a Martínez ni se sabía que la chica consumiera drogas.
Tatiana remarcó que a la adolescente "la dejaron tirada en la puerta del hospital y esta persona huyó y la pudieron detener en Punta Alta", donde reside. Amigos y familiares organizan una marcha para el viernes a la tarde en reclamo de justicia.
Dejaron libre al único sospechoso
La Justicia ordenó la libertad del único detenido por el caso de la muerte de la menor Mariana Sol Bruna por entender que no se encuentra configurado el delito de abandono de persona. La medida fue dispuesta por el juez de Garantías N§ 2, doctor Guillermo Mércuri, quien rechazó el pedido del fiscal Marcelo Romero Jardín de convertir en detención la aprehensión que venía sufriendo el joven de 28 años, oriundo de Punta Alta. De esta manera, no quedan detenidos por el conmocionante caso que se descubrió el pasado sábado.
"No se qué pensarán de mí"
Periodista de La Nueva de Bahía Blanca, Gustavo Pereyra fue hasta la casa donde vive Luis Nicolás Martínez, quien hasta el lunes era el único sospechoso por la muerte de Bruna, y trató de entrevistar al hombre de 28 años. Se presentó pero el sujeto se niega a decir algo, amparado detrás de una ventana. Hace el gesto con las manos de no querer saber nada con preguntas sobre la causa que lo involucra: la muerte de Mariana Sol Bruna. "No sé qué pensará la gente de mí", balbucea al fin y pareciera que fuera lo único que le preocupara".
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