Durante el tiempo de investigación acerca de los orígenes de la feria y la fiesta del Señor del Sumalao, tomé contacto con un sacerdote de Tarija, el padre Garvin Grech, de origen maltés, carmelita misionero en Bolivia. Luego de leer los apuntes de la investigación, me habló largamente de la fiesta del Señor de Manquiri y sus ritos, encontrando en ellos una gran similitud con los ritos que practican los peregrinos durante las fiestas del Cristo del Sumalao. Los siete viernes de devoción previos a la fiesta que evocan los siete dones del Espíritu Santo, la peregrinación nocturna y la guardia al Señor con los cirios, el recoger el cebo de las velas como ungento para la salud, y al día siguiente, el refrescar el rostro con agua de la vertiente natural, o sumergir a los niños recordando el bautismo y pidiendo la salud, más allá del frío que haga en la zona; todos ritos que no son paganos, sino que evocan los sacramentales cristianos y recuerdan la Confirmación y el Bautismo.
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Durante el tiempo de investigación acerca de los orígenes de la feria y la fiesta del Señor del Sumalao, tomé contacto con un sacerdote de Tarija, el padre Garvin Grech, de origen maltés, carmelita misionero en Bolivia. Luego de leer los apuntes de la investigación, me habló largamente de la fiesta del Señor de Manquiri y sus ritos, encontrando en ellos una gran similitud con los ritos que practican los peregrinos durante las fiestas del Cristo del Sumalao. Los siete viernes de devoción previos a la fiesta que evocan los siete dones del Espíritu Santo, la peregrinación nocturna y la guardia al Señor con los cirios, el recoger el cebo de las velas como ungento para la salud, y al día siguiente, el refrescar el rostro con agua de la vertiente natural, o sumergir a los niños recordando el bautismo y pidiendo la salud, más allá del frío que haga en la zona; todos ritos que no son paganos, sino que evocan los sacramentales cristianos y recuerdan la Confirmación y el Bautismo.
El santuario de Manquiri se encuentra ubicado en el Municipio de Chulchucani a 25 Kilómetros de la carretera Potosí - Sucre, es un santuario muy especial, cuyos datos de construcción nos remontan a fines del siglo XVII. El Santuario de Manquiri está realizado con miles de detalles a nivel iconográfico, tanto la portada de la iglesia como la iglesia misma, es una de las pocas que está hecha en cruz griega, construida en un montículo que hace mucha referencia al tema de Jerusalén, así como Jerusalén fue levantada sobre el Monte Sión, hay datos que demuestran la copia de la construcción de la iglesia de Manquiri con la iglesia de Jerusalén.
Existe una estrecha relación entre Sumalao y su feria comercial de mulas y otros productos regionales y Potosí, el centro minero por excelencia en los tiempos de la colonia española, vastamente documentado; de modo que, también, podemos afirmar que existe una relación peculiar entre el Santuario del Sumalao y el Santuario de Manquiri. Los ritos de ambos santuarios, que sobrevivieron a la empecinada tarea purificadora de la Iglesia Católica de siglo XIX y parte del siglo XX por la influencia del catolicismo ilustrado; a la presión de las modas y al avance del secularismo, y pusieron de manifiesto la fuerza con que se incorporaron a nuestra cultura.
Según relatos del padre Grech, la gente llega a Manquiri en peregrinación: "Mucha gente suele ir a pie el día sábado por la noche. Se asiste al santuario y al llegar participan de la misa, comen el famoso ají de lisa, compran algunas cosas y se regresan a la ciudad. La mayoría asiste por una devoción muy sana a Manquiri, básicamente para pedir la salud, esa es su característica; los peregrinos lo veneran como Señor de la salud y la prosperidad. Las peregrinaciones, el caminar, el llegar permite un ambiente místico en la persona; realizan como en Sumalao, el rito de purificación con el agua y llevan el cebo de las velas como ungento".
Tanto en Manquiri como en Sumalao se celebra a Cristo Crucificado en Pentecostés, y se repica la fiesta en su octava, en el domingo de la Santísima Trinidad. Surge, por ello, la pregunta acerca de la significación de ésta fecha, ya que siendo la fiesta del Espíritu Santo, la centralidad está dada por la imagen de Jesús Crucificado.
El padre Gustavo Rivero, uno de los Responsables de esta Fiesta en Manquiri comenta: "La fiesta del Señor de Manquiri tiene que ver con la fiesta del Espíritu Santo, alguna vez preguntaban cuál era la relación entre Pentecostés y el Cristo que tenemos en Manquiri y releyendo el texto bíblico se dice que Jesús cuando murió, exhalo su espíritu. De ahí la idea de la representación del Señor de Manquiri. Esta es la fiesta del Espíritu de Dios que Jesús nos deja al morir y de esta parte la costumbre de la gente en Potosí de ir durante seis domingos al Santuario de Manquiri".
Tenemos que pensar que la evangelización tanto jesuítica como franciscana fue netamente "Cristo-céntrica" y no había, en esa época, representaciones del Espíritu Santo como una paloma, que aparecen recién a fines del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX. El arte indoamericano representó a la Trinidad con tres figuras idénticas, y la incorporación de la paloma como imagen del Espíritu Santo es posterior. Tal vez se quiso evitar confundir a los indígenas, que eran panteístas.
Además, la versión de las Sagrada Escrituras utilizada para evangelizar era la versión traducida a fines del 1600 por el sacerdote escolapio Felipe di Scio de San Miguel, en la cual, para hablar de Cristo en agonía, se usa la expresión "exhaló su Espíritu", mientras que las modernas traducciones utilizan la expresión "expiró".
Teológicamente hablando, si me permiten, es correcta la representación del Espíritu Santo en un Cristo muerto en la Cruz, porque la centralidad del Evangelio es la Palabra, Jesucristo, Dios hecho hombre, y el Espíritu Santo es el amor del Padre y del Hijo, que llega a nosotros como don: "Cuando venga el Consolador, a quien yo enviaré del Padre, es decir, el Espíritu de verdad que procede del Padre, El dará testimonio de mí" (Jn 15, 16). Queda pendiente profundizar el aspecto teológico enunciado, pero es esclarecedor para entender esta fiesta.
La relación entre Sumalao y Manquiri, a simple vista, es indiscutible. Queda por investigar si la fiesta del Señor del Sumalao fue parte del legado que dejaron los múltiples intercambios comerciales, culturales y religiosos entre Salta y Potosí. Aparentemente, la fiesta del Señor de Manquiri tiene varios años más que la fiesta del Sumalao, y nuestro pueblo desciende de la misma gente que habitaba la región del Alto Perú, hoy territorio de Bolivia.
El ir y venir de los peregrinos y feriantes por diversas razones era continuo. Estuvimos hermanados en la economía, en la política, en la cultura, en la lengua, en la fe y aunque hoy existen fronteras, no pueden separar el espíritu de fraternidad de las Provincias Unidas de Sudamérica consagrada en el Acta de la Independencia de 1816. Sumalao es un símbolo que habla de la necesaria y natural integración regional con el Virreinato del Alto Perú.