San Lorenzo avanzó a los octavos de final de la Copa Sudamericana 2018 pese a caer nuevamente frente Deportes Temucho, esta vez por 1 a 0, pero sacó ventaja del fallo de Conmebol que le dio los puntos por el partido de ida por la mala inclusión de un jugador.
Temuco consiguió una histórica victoria en Buenos Aires 2-1 en el primer juego, pero Conmebol dictaminó que el equipo chileno incurrió en un fallo reglamentario -incluyendo a un jugador inhabilitado- y le dio el triunfo a San Lorenzo por 3-0.
En la revancha, Temuco volvió a demostrar su superioridad y venció al ciclón con el gol de Matías Donoso, en el tercer minuto de descuento.
Temuco lanzó todos sus dardos en ataque desde el minuto uno y convirtó al arquero Nicolás Navarro en figura.
San Lorenzo tambaleó pero aguantó los embates de un entusiasta Temuco que se animó a faltar el respeto al campeón de la primera Copa Sudamericana, en 2002. En ataque, el ciclón fue la nada misma y se fue al descanso sin una chance clara para marcar.
Con los equipos en cancha y antes de que iniciara el duelo, un pequeño proyectil golpeó la espalda de Navarro generando un momento tenso que reflejó el enojo de la hinchada local con la suerte que corrió en las oficinas su equipo. Pero el juego continuó y Navarro siguió siendo el héroe, pese al gol en tiempo de descuento de Donoso.
En la conferencia de prensa, un periodista chileno le preguntó si no era una “vergüenza” cómo habían pasado de ronda San Lorenzo, y el arquero respondió con altura. “Vergüenza es lo que vivimos desde que llegamos a Chile, no tuvimos predio para ir a entrenar, nos quisieron suspender el hotel, nos insultaron todo el partido, lastimaron a un profe y me voy a bañar al hotel porque nos cortaron el agua. Se meten con Argentina y no son ningún ejemplo”.
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San Lorenzo avanzó a los octavos de final de la Copa Sudamericana 2018 pese a caer nuevamente frente Deportes Temucho, esta vez por 1 a 0, pero sacó ventaja del fallo de Conmebol que le dio los puntos por el partido de ida por la mala inclusión de un jugador.
Temuco consiguió una histórica victoria en Buenos Aires 2-1 en el primer juego, pero Conmebol dictaminó que el equipo chileno incurrió en un fallo reglamentario -incluyendo a un jugador inhabilitado- y le dio el triunfo a San Lorenzo por 3-0.
En la revancha, Temuco volvió a demostrar su superioridad y venció al ciclón con el gol de Matías Donoso, en el tercer minuto de descuento.
Temuco lanzó todos sus dardos en ataque desde el minuto uno y convirtó al arquero Nicolás Navarro en figura.
San Lorenzo tambaleó pero aguantó los embates de un entusiasta Temuco que se animó a faltar el respeto al campeón de la primera Copa Sudamericana, en 2002. En ataque, el ciclón fue la nada misma y se fue al descanso sin una chance clara para marcar.
Con los equipos en cancha y antes de que iniciara el duelo, un pequeño proyectil golpeó la espalda de Navarro generando un momento tenso que reflejó el enojo de la hinchada local con la suerte que corrió en las oficinas su equipo. Pero el juego continuó y Navarro siguió siendo el héroe, pese al gol en tiempo de descuento de Donoso.
En la conferencia de prensa, un periodista chileno le preguntó si no era una “vergüenza” cómo habían pasado de ronda San Lorenzo, y el arquero respondió con altura. “Vergüenza es lo que vivimos desde que llegamos a Chile, no tuvimos predio para ir a entrenar, nos quisieron suspender el hotel, nos insultaron todo el partido, lastimaron a un profe y me voy a bañar al hotel porque nos cortaron el agua. Se meten con Argentina y no son ningún ejemplo”.
Por su parte, el Pampa Biaggio también respondió: “Se equivoca la gente de Temuco y la culpa la tiene San Lorenzo. Con eso no tenemos vergüenza, hicimos lo que teníamos que hacer, entrar a la cancha e intentar ganar, aunque las cosas no salieron como queríamos”.
En octavos de final San Lorenzo enfrentará a Nacional de Uruguay, que eliminó al Sol de América paraguayo.