En la mañana de ayer se produjo en esta capital quizá la más espectacular y osada fuga de un detenido que se tenga memoria en los últimos tiempos.
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En la mañana de ayer se produjo en esta capital quizá la más espectacular y osada fuga de un detenido que se tenga memoria en los últimos tiempos.
El sujeto no solo huyó del patrullero que lo transportaba hacia el control de legalidad en la central misma de policía (calle Santiago del Estero al 700), sino que corrió por el microcentro esposado y logró burlar las cámaras de seguridad, las patrullas peatonales y a los policías que salieron a su encuentro.
A las 12.30 del mediodía el joven delincuente ya había desaparecido del centro como por arte de magia.
En la emergencia y ante el peligro que representa para los ciudadanos un hombre esposado y en fuga, la policía ordenó un inmediato operativo cerrojo en todas las entradas y salidas de la capital. Media hora más tarde policías de la subcomisaría de barrio Autódromo apostados en el acceso a Salta lograron ubicar una motocarga de carrero que transportaba acostado sobre su caja a un individuo sospechoso.
La motocarga de color negro con toldo azul del tipo feria ambulante intentó llegar hasta la intersección del ingreso a villa Floresta por la autopista de acceso de los camiones, pero ya en el semáforo de barrio Autódromo lo estaban esperando.
Ni lerdo ni perezoso, el conductor de la motocarga intentó evadir ese puesto de control e ingresó por calle Washington encontrándose de frente con los motoristas de 911, personal de la Brigada de Investigaciones y en pocos segundos con diez móviles de la Policía de Salta, que había desplegado todos sus recursos estratégicos para ubicar a los fugitivos.
Tanto el delincuente que huía como el conductor de la motocarga fueron reducidos de inmediato y permanecieron esposados y asegurados a las barandas de la motocarga de carreros hasta que el fiscal actuante determinó su traslado hacia la sede de la Comisaría 4 y el secuestro del vehículo utilizado para la fuga.
Momentos más tarde se presentó en el lugar la madre del conductor de la moto para interiorizarse de la frustrada fuga que protagonizó su hijo como conductor junto a un supuesto "amigo" en problemas.
Los dos detenidos fueron trasladados hacia la sede de la Fiscalía Penal 4, que se encuentra en el mismo edificio de la Comisaría 4.
Hasta el momento no se supo cómo se encuadrarían los delitos cometidos por estas dos personas y las responsabilidades que les caben. Una vez más la policía demostró que en la emergencia los recursos con los que cuenta responden a las circunstancias.