Todavía no llegaron las soluciones que esperan los remiseros que protestaron, con marchas, acampes y huelgas de hambre, a lo largo de la segunda mitad del año pasado en la capital salteña. Un grupo de choferes profesionales anunció que realizará una protesta ante la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) para reclamar transparencia en el manejo de licencias y que se ponga fin a los contratos leoninos de parte de los dueños de agencias de remises.
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Todavía no llegaron las soluciones que esperan los remiseros que protestaron, con marchas, acampes y huelgas de hambre, a lo largo de la segunda mitad del año pasado en la capital salteña. Un grupo de choferes profesionales anunció que realizará una protesta ante la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) para reclamar transparencia en el manejo de licencias y que se ponga fin a los contratos leoninos de parte de los dueños de agencias de remises.
La manifestación está organizada para el martes próximo, desde las 8.30, al frente de la oficina de la AMT, ubicada a metros del puente del río Arenales sobre la avenida Tavella.
El conflicto entre los remiseros y el organismo regulador de transporte de la Provincia parecía haber entrado en una vía de escape a mediados de noviembre pasado, cuando se prometió el otorgamiento de 45 permisos para trabajar por un año a los conductores que habían quedado sin las licencias que alquilaban a los agencieros.
Había un compromiso, además, desde la comisión bicameral de Transporte de la Legislatura, de que se iban a implementar controles para evitar que los propietarios de remiseras cobren hasta seis veces más de lo que estipulan los contratos de alquiler de licencias.
Según denunció Sergio Salinas, delegado de la Unión de Conductores de Autos al Instante y Remises (Ucairra), cinco de los permisos que otorgó la AMT terminaron en manos de dos agencieros.
Dijo también que siguen los abusos en la mayoría de las remiseras por el cobro ilegal de un sobreprecio a los choferes. Señaló que mientras los contratos indican que para alquilar una licencia se debe pagar entre 1.500 a 2.000 pesos por mes, las agencias exigen en realidad entre 10.000 a 12.000 pesos.
"Con esa maniobra evaden cifras millonarias de impuestos", afirmó Salinas a El Tribuno.
Aseguró que en los dos últimos meses presentó varias notas ante la AMT para denunciar a los agencieros que se vieron favorecidos con los permisos, pero no ocurrió nada. "Seguimos en la misma situación que cuando empezamos a movilizarnos en julio del año pasado", indicó el representante de los remisero.
Ucairra es el sindicato, constituido en Buenos Aires, que eligieron los manifestantes para tener una mayor protección legal ante sus reclamos. Antes estaban agrupados en una entidad que denominaron Unión de Choferes de Remises y Afines de Salta (Ucras), que ya fue disuelta.
"Tuco" Bazán, un ex-Ucras y organizador de las protestas de los remiseros, dijo ayer a este medio que entre los conductores circulan versiones de que desde la AMT se estarían "vendiendo" licencias de remises y taxis.
Respuesta
El presidente de la AMT, Federico Hanne, señaló a El Tribuno que está al tanto de las denuncias, pero sostiene que no existe ninguna irregularidad en cuanto al supuesto beneficio que habrían obtenido dos agencieros con cincos permisos que correspondían a los remiseros.
De todas maneras, aseguró que se puso en marcha una auditoría para investigar las acusaciones.
En cuanto al pedido de control sobre lo que les cobran a los choferes por las licencias, Hanne reiteró que no es competencia de la AMT.
"No nos podemos meter en un contrato de privados", explicó el funcionario.
Relacionó la protesta de los remiseros con el "año electoral". Del mismo modo se refirió al reclamo de dirigentes taxistas, quienes se oponen al proceso iniciado para adjudicar licencias de taxis a conductores con 15 años de servicio.