Tradicionalmente, el inversor inmobiliario acudió al ladrillo en busca de refugio de su capital. Los inmuebles presentan la particularidad de valorizarse año tras año y su renta mantenerse estable en comparación con otras opciones de inversión. La rentabilidad promedio de un inmueble en nuestra región oscila entre los 3,5 y 5%, ello dependiendo de la ubicación y las posibilidades de la propiedad. Se podrá entender que comparado con otras alternativas de inversión la rentabilidad es baja, pero a ello habrá que agregarle la apreciación de la tierra. Una alternativa para mejorar la rentabilidad de la inversión inmobiliaria es trabajar la propiedad en una plataforma de alquiler temporario. Salta es una provincia receptiva en términos de turismo. Y podemos asesorar a nuestros clientes.
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Tradicionalmente, el inversor inmobiliario acudió al ladrillo en busca de refugio de su capital. Los inmuebles presentan la particularidad de valorizarse año tras año y su renta mantenerse estable en comparación con otras opciones de inversión. La rentabilidad promedio de un inmueble en nuestra región oscila entre los 3,5 y 5%, ello dependiendo de la ubicación y las posibilidades de la propiedad. Se podrá entender que comparado con otras alternativas de inversión la rentabilidad es baja, pero a ello habrá que agregarle la apreciación de la tierra. Una alternativa para mejorar la rentabilidad de la inversión inmobiliaria es trabajar la propiedad en una plataforma de alquiler temporario. Salta es una provincia receptiva en términos de turismo. Y podemos asesorar a nuestros clientes.
Hay otras opciones que representan excelentes alternativas de inversión, para aquellos que apuestan al futuro. Co-working, co-living y la última, y casi desconocida, co-housing se están instalando en la mente de los inversores.
Es decir, los “CO” resultan tentadores para los inversores, donde el concepto parte de compartir espacios, distribuir mejor los costos, entrar con inversiones más pequeñas.
Estas tendencias están dadas por la nueva manera de interpretar y de vivir que tenemos. El CO-WORKING consiste en desarrollar un espacio compartido de oficinas que se alquilan temporalmente y se comparten los costos. La ventaja para el inquilino es la flexibilidad de entrada y salida y falta de inversión de ingreso. La rentabilidad de este modelo oscila entre 8 y 14% dependiendo de la gestión en estos espacios.
EL CO-LIVING consiste en unidades pequeñas, de pocos metros, pero con espacios comunes y amenities de gran porte, prestaciones y calidad. La tasa de retorno puede duplicar la inversión tradicional.
El CO-HOUSING es considerado un modelo del futuro, que llegará para quedarse. Es una especie del CO-LIVING al que se le agrega un proceso de atención y cuidados sanitarios y personales. Se busca mejorar el modo de vida de las personas mayores. La rentabilidad será similar a la de un co-living, más el management de la parte de cuidados.