El próximo viernes habrá una conciliación obligatoria entre la empresa Embotelladora del Norte y los trabajadores, según lo dispuso la Secretaría de Trabajo de la Provincia.
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El próximo viernes habrá una conciliación obligatoria entre la empresa Embotelladora del Norte y los trabajadores, según lo dispuso la Secretaría de Trabajo de la Provincia.
Ayer, los empleados de la gaseosa Talca realizaron una manifestación por reclamos salariales. Temprano habían llamado a asamblea permanente y pararon la producción.
En diálogo con Radio Salta, Juan Carlos Ortega, secretario general del Sindicato Unificado de Trabajadores de Aguas, Gaseosas y Afines (Sutiaga), dijo que el reclamo fue porque la empresa, en un principio, no cumplía con la homologación de un convenio salarial. Aseguró que tras dar ese paso, un año y medio después, la embotelladora les respondió que no contaba con los fondos para hacer frente a las nuevas liquidaciones.
Ortega aseguró que la deuda con cada trabajador asciende a 120 mil pesos y cuestionó que no se haya dado respuestas a los 90 empleados.
La protesta de los trabajadores de gaseosa no fue la única ayer. Empleados de la empresa Gasnor también se manifestaron por una recomposición salarial. Dijeron que hubo subas de tarifas pero ese incremento no se vio reflejado en sus recibos de sueldo, por lo que llevaron adelante un paro. Hoy determinarían cómo siguen los reclamos ante la distribuidora.
Situación crítica
El Tribuno publicó ayer una nota sobre la crisis que atraviesa otro sector: el comercio. Según datos del sindicato hasta el 31 de agosto se despidieron 700 empleados. Aseguraron que unos 190 fueron reincorporados en otras empresas, principalmente en los nuevos mayoristas que se instalaron en la ciudad. Es decir que unos 500 no volvieron a conseguir un puesto en el mercado laboral. "Esto sin dudas es un número alto porque nunca supera 350 despidos, aun en los años de crisis. Es altísimo", expresó a este medio el secretario gremial del Sindicato de Empleados de Comercio, Ángel Ortiz.
Recordaron que desde junio pasado los empleados de Emilio Luque están viviendo momentos de angustia e incertidumbre por sus puestos de trabajo. Resulta que el mayorista desde hace meses presenta serios problemas financieros. La sucursal que tiene en Salta se encuentra en un proceso preventivo de crisis y está a punto de cerrar. Los últimos datos del Indec mostraron que en Salta hay 38.000 personas están desocupadas.