El chofer del Uber en el que se trasladaba María Caccone, la mujer asesinada de un balazo en el cuello el 14 de este mes por motochorros cuando iba a depositar dinero a un banco de la localidad bonaerense de San Justo, quedó detenido acusado de haber actuado como entregador. Se trata de Juan Marcelo Rearte (44), el conductor del Renault Logan en el que iba Caccone junto a un compañero de trabajo, y quien había resultado herido durante el hecho de un balazo en la cintura.
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El chofer del Uber en el que se trasladaba María Caccone, la mujer asesinada de un balazo en el cuello el 14 de este mes por motochorros cuando iba a depositar dinero a un banco de la localidad bonaerense de San Justo, quedó detenido acusado de haber actuado como entregador. Se trata de Juan Marcelo Rearte (44), el conductor del Renault Logan en el que iba Caccone junto a un compañero de trabajo, y quien había resultado herido durante el hecho de un balazo en la cintura.
De acuerdo al relato de los voceros, debido a algunas contradicciones detectadas al ampliar su testimonio en la causa, la Justicia dispuso su arresto como sospechoso, por lo que era indagado por el fiscal de Homicidios de La Matanza a cargo de la causa, Claudio Fornaro.
Los pesquisas creen que el chofer del Uber fue quien le aportó la información al resto de la banda para concretar el robo a Caccone.
Fuentes de la investigación aseguraron que Rearte ya había trasladado en otras oportunidades a la mujer a la entidad bancaria y sabía que cuando la llevaba era para hacer depósitos de dinero.
Los pesquisas añadieron que también en las últimas horas, en el marco de la investigación, fue hallado en la localidad de La Tablada un auto Fiat Uno que, se cree, pudo haber participado del hecho en el que fue asesinada Caccone, ya que se lo ve en las imágenes de las cámaras de seguridad analizadas detrás del Logan conducido por Rearte, explicaron los voceros.
Ese vehículo fue localizado tras un rastreo satelital y al momento de ser encontrado estaba en poder de un adolescente de 16 años, quien quedó aprehendido.
En tanto, las llaves de ese vehículo fueron halladas en otra casa de esa misma localidad del partido de La Matanza, donde además se encontraron tres celulares y marihuana.
En esa vivienda se encontraba una mujer de 45 años, que también quedó aprehendida pero por encubrimiento, al igual que el adolescente.
Los investigadores analizaban ahora esos teléfonos celulares hallados en esa vivienda para ver si existe algún tipo de contacto entre las personas supuestamente involucradas en el hecho.
El crimen de Caccone ocurrió el pasado 14 de marzo, alrededor de las 14, en el cruce de Australia y avenida Ignacio Arieta, en pleno centro de San Justo, partido de La Matanza, cuando la mujer, quien trabajaba desde hacía cuatro meses en un frigorífico de esa zona, abordó el auto conducido por Rearte para ir a depositar 120.000 pesos de la empresa al banco Comafi de esa localidad, junto a su compañero de trabajo Marcos Fabián González (35).
Antes de llegar a la entidad bancaria, al menos tres motochorros interceptaron con intenciones de robo el auto en el que iba Caccone y, según las fuentes, uno de ellos se bajó de la moto armado, se acercó a la ventanilla del asiento del acompañante y, sin mediar palabra, efectuó un disparo que impactó en el cuello de la mujer.
El ladrón disparó una segunda vez e hirió al chofer Rearte en la cintura, tras lo cual tomó la cartera de la mujer, que contenía parte del dinero, y se escapó con su cómplice.
Los tres presuntos autores del hecho quedaron grabados en una cámara de seguridad de un local gastronómico situado en la misma cuadra de la calle Australia y avenida Arieta, esperando la llegada de la víctima.
Tras el crimen de la mujer, su compañero de trabajo fue detenido acusado de haberse quedado con parte del dinero que llevaban al banco, aunque luego fue liberado tras ser indagado por el delito de hurto calamitoso.
El fiscal Fornaro le imputó haber aprovechado la ocasión para quedarse con unos 20.000 del total que iba a depositar al banco junto con su compañera.
En su indagatoria, el hombre confesó que se había guardado el dinero antes de la llegada de la policía al lugar y dijo que necesitaba plata porque era el cumpleaños de su hijo mayor.
En tanto, los investigadores continuaban en la búsqueda de los autores materiales del hecho, quienes permanecían prófugos.
Detenido
Tras su detención, y ante los policías que realizaron el procedimiento, Rearte habría confesado su participación en el hecho.
La detención de Rearte derivó en otros allanamientos en la zona de La Tablada.
Allí los investigadores dieron con un Fiat Uno que aparece en videos e imágenes previos al ataque, en una actitud sospechosa detrás del Renault Logan que manejaba Rearte. Inmediatamente después se supo que desde la empresa Uber aclararon que Rearte está efectivamente registrado como chofer de la empresa de viajes, pero que ese servicio en el que viajó Caccone no fue pedido a través de la aplicación. De todas maneras la vinculación del chofer con este tipo de transporte está públicamente acreditada en los medios.