Fanáticos de River cortaron hoy la avenida Paraguay por más de dos horas para reclamar que se entreguen las entradas que corresponden al cupo de personas con discapacidad. El equipo millonario jugará mañana en el estadio Martarena por la Copa Argentina y ya hubo denuncias por reventa de entradas a pesar de que solo podían venderse dos ingresos por persona.
inicia sesión o regístrate.
Fanáticos de River cortaron hoy la avenida Paraguay por más de dos horas para reclamar que se entreguen las entradas que corresponden al cupo de personas con discapacidad. El equipo millonario jugará mañana en el estadio Martarena por la Copa Argentina y ya hubo denuncias por reventa de entradas a pesar de que solo podían venderse dos ingresos por persona.
Los manifestantes que provocaron desde las 14 un caos de tránsito por los desvíos forzados, dijeron a este medio que no se habían entregado la totalidad de las 600 entradas destinadas a personas con discapacidad. Sin embargo, el secretario de Deportes Sergio Plaza desmintió dicha información. "Las entradas para discapacitados son por ley el 2 por ciento de la capacidad -en este caso 18.000 entradas-. Incluso teníamos dispuestas 450 y las extendimos a 600. Los que quedaron afuera son los que fueron a cortar la avenida Paraguay", le dijo Plaza a El Tribuno, antes de llegar al lugar de la manifestación.
Aparentemente la confusión surgió de una persona -que no sería de la Secretaría- que entregó números durante la fila que los hinchas comenzaron a hacer anoche para obtener su ingreso. "Nos sentimos marginados y discriminados", exclamó de todas maneras uno de los manifestantes.
Aunque Plaza iba a dialogar con ellos no creía posible se entreguen más entradas porque se cumplió con lo pactado y especialmente "por una cuestión de seguridad", ya que la capacidad está colmada y ya se entregaron los ingresos correspondientes según el orden de llegada.
La protesta comenzó cerca de las 13 y abarcaba ambos carriles de la avenida por lo que el caos en el tránsito era total.