Esta semana fue el día de la empleada de casas particulares. Oportunidad que las trabajadoras aprovecharon para alzar sus reclamos por las condiciones laborales y el bajo sueldo que perciben. Cifras que se confirman con los índices oficiales.
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Esta semana fue el día de la empleada de casas particulares. Oportunidad que las trabajadoras aprovecharon para alzar sus reclamos por las condiciones laborales y el bajo sueldo que perciben. Cifras que se confirman con los índices oficiales.
El viernes se acordó un nuevo aumento del 15% para el personal de casas particulares. Con esa actualización, una empleada doméstica "con retiro" (que no reside en su lugar de trabajo), cobra por tareas de lavado, planchado y elaboración de comidas, 12.702 pesos por una jornada diaria de 8 horas o 48 semanales. Alrededor de 94 pesos la hora. Mientras que una empleada sin retiro, cama adentro, percibe 14.125 pesos, un aproximado de 110 pesos por hora laboral. Las categorías para personal a cargo de cuidado de personas o coordinación y supervisión de trabajo doméstico tienen escalas salariales superiores.
La ley que regula la actividad es la 26.844 de Régimen Especial de Contrato de Trabajo para el Personal de Casas Particulares.
Los últimos datos que dio en febrero el Indec sobre la canasta básica alimentaria que contempla la cantidad mínima de alimentos que necesita una familia de cuatro integrantes para no caer en la indigencia, es de 11.117 pesos. La Canasta Básica Total, que incluye además de alimentos, una cantidad mínima de indumentaria y servicios, para febrero fue de 27.570 pesos. Si se tiene en cuenta que el sueldo de una empleada doméstica registrada es de 12.702 pesos, y si la trabajadora es el único sustento de una familia de 4 integrantes, (como advierten muchas de las trabajadoras), su sueldo roza el mínimo que se necesita para no ser indigente.
Esta situación se agrava si se tiene en cuenta que el trabajo doméstico es uno de los más precarizados dentro de la economía del país.
Más del 70 por ciento trabaja en la informalidad
Las trabajadoras precarizadas reciben entre un 50 y 70 de lo fijado por ley.
Gabriela Ferro, socióloga e investigadora que realizó un estudio sobre la situación de las empleadas domésticas en Salta, indicó que 1 de cada 4 asalariadas registradas se dedica a esta actividad, y que el 78% continúa estando “en negro” según datos del Indec. La académica aseguró que solo en la ciudad de Salta y sus alrededores, llegan a ser más de 24.000 trabajadoras de casas particulares.
Por su lado, Ana Díaz, de la Asociación “Unidas podemos lograrlo”, aseguró que “la mayoría esta “en negro”, y que de los 12.700 pesos que deberían cobran, perciben un 50 o 70 por ciento. Es decir, entre 6 y 9 mil pesos. Con estos números, la trabajadora que si está registrada roza la línea de indigencia, mientras que la brecha se agranda con la que trabaja de manera informal.
“Estamos hablando de un sueldo de 12 mil pesos, quedó muy bajo para lo situación económica actual”,advirtió el secretario de Trabajo de la Provincia, Alfredo Batule.
Durante muchos años el trabajo doméstico se mantuvo con altos índices de irregularidades, lo que pudo ser revertido, aunque no del todo, a partir de la ley 26.844 que se dictó en el 2013. “Con la ley se tomó mayor conciencia de parte de los trabajadores en la registración. Reconoció derechos que antes no se tenían en cuenta. Seguirán habiendo irregularidades”, reconoció Batule.
Descuento en el boleto
Con altos índices de inflación, que el año pasado llegó casi el 50 por ciento, en un sector donde el trabajo no registrado predomina, y con un monto irrisorio en los sueldos, las empleadas domésticas quedan en una crítica situación.
En este contexto, sumado al constante aumento de boleto que a fin de año trepará a 26 pesos, las empleadas domésticas en Salta solicitan ser incluidas dentro de la tarifa social de Saeta. Piden acceder a descuentos del 50% en el boleto del transporte público como sucede en otras provincias.
A través de la Tarifa Social Federal SUBE, empleadas de casas particulares obtienen un descuento del 55% para pasajes en colectivos, trenes, subtes y peajes de todo el país, pero no rige en Salta. Esta Tarifa Social está subsidiada por el Estado Nacional.
“Teniendo en cuenta el sueldo que cobran y que los empleadores no están en obligación de pagarles el transporte, se debería considerar que tengan un descuento”, señaló Batule. Referentes de las trabajadoras buscan ser escuchadas por legisladores nacionales para plantear que Saeta también sea incluida en los descuentos del transporte público.