Mayo del 69 fue el comienzo del fin de la dictadura de Juan Carlos Onganía. Hace 50 años la represión a los estudiantes correntinos que protestaban por el incremento del ticket del comedor universitario derivó en el asesinato de Juan José Cabral, alumno de la carrera de Medicina. La protesta, conocida como el “Correntinazo”, fue el antecedente de otras manifestaciones similares que se replicarían en Rosario y Córdoba, que abrieron el camino para terminar con el Onganiato.
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Mayo del 69 fue el comienzo del fin de la dictadura de Juan Carlos Onganía. Hace 50 años la represión a los estudiantes correntinos que protestaban por el incremento del ticket del comedor universitario derivó en el asesinato de Juan José Cabral, alumno de la carrera de Medicina. La protesta, conocida como el “Correntinazo”, fue el antecedente de otras manifestaciones similares que se replicarían en Rosario y Córdoba, que abrieron el camino para terminar con el Onganiato.
Acto realizado ayer en Corrientes
La fecha fue evocada en las universidades nacionales, cuyos docentes se encuentran de paro hoy y mañana en reclamo de mejoras salariales y en defensa de la educación publica.
El recuerdo de Juan José Cabral, a 50 años de su muerte
Una multitudinaria marcha tuvo lugar ayer en la capital correntina en la que participaron estudiantes, docente, gremios y vecinos para recordar la fecha bajo la consigna “En Defensa de la Educación Pública - Juan José Cabral Presente”.
La historia
En mayo del 69 el gobierno militar de facto de Juan Carlos Onganía decretó la intervención de las universidades nacionales y en la Universidad Nacional del Nordeste, Carlos Walker, el rector interventor, ordenó la disolución de los Centros de Estudiantes y privatiza el comedor, anunciando un aumento del 500% en los precios de la comida.
Esta noticia generó gran malestar en la comunidad estudiantil que no tardó en organizarse para canalizar su descontento y para intentar que se revierta la medida. La Federación Universitaria del Nordeste inició una serie de movilizaciones y reuniones con los decanos.
La tapa del diario El Litoral da cuenta de los ocurrido en mayo del 69 en Corrientes.
La unión entre los gremios y los estudiantes era otra de las grandes discusiones de la época y en Corrientes se materializó con el apoyo que la filial local de la CGT y de numerosos gremios a las protestas de los universitarios.
Los estudiantes universitarios organizados en la Federación Universitaria del Nordeste (FUNE) declaran una huelga en defensa del comedor universitario. El 15 de mayo de 1969 la FUNE, convoca a una marcha al rectorado. Esta marcha fue violentamente reprimida por las fuerzas policiales que dispararon a los estudiantes resultando varios de ellos heridos y asesinando a Juan José Cabral, estudiante de cuarto año de medicina, de 22 años y militante estudiantil.
La represión que provocó la muerte de Cabral fue repudiada en todo el país y en las calles empezó a plasmarse la unidad obrero-estudiantil que llegó a su máxima expresión con el Rosariazo y el Cordobazo.
El reclamo contra el aumento del ticket del comedor universitario, terminó siendo la primera rebelión contra la dictadura de Juan Carlos Onganía. El 15 de mayo mataron al estudiante Cabral, luego de una feroz represión a los estudiantes. Los correntinos rechazaron masivamente el hecho.
Juan José Cabral tenía 22 años y estudiaba Medicina.
La noticia del asesinato circuló rápidamente por la ciudad, generando tristeza y bronca. Los comercios comenzaron a cerrar y los crespones negros a ocupar los frentes de las casas. La ola de repudios no se hizo esperar y casi todas las asociaciones profesionales, organizaciones sindicales y entidades de la sociedad civil se expresaron en esos términos.
Un muerto y más de 30 heridos terminó siendo el saldo de la cruel represión de la Policía del 15 de mayo contra una movilización que reclamaba por los derechos de los estudiantes universitarios.
Esa misma noche una ambulancia trasladó los restos de Cabral hacia Paso de los Libres, su ciudad natal donde fue sepultado. Ninguna autoridad acompañó a la familia.
Acorralado, Carlos Walker terminó renunciando al cargo de rector y se rescindieron los contratos de privatización de los comedores de Corrientes y Resistencia.
A los pocos días tuvieron lugar el Rosariazo, luego el Cordobazo. El Correntinazo de 1969 fue el puntapié inicial y antecedente directo de esas movilizaciones que terminaron minando el poder de Juan Carlos Onganía.
El crimen de Juan José Cabral terminó impune. Nadie fue condenado.
Fuente: Diarios Época, Norte y El Litoral de Corrientes