El primer trimestre de este 2019 fue, quizás, uno de los más complicados en el sector compra-venta de inmuebles. Durante 2017 y principios de 2018 se produjo una reactivación en el mercado inmobiliario que estuvo motorizada por la accesibilidad a los créditos hipotecarios. La situación cambió después de mayo del año pasado, cuando se desplomaron las operaciones a causa de la debacle económica que vivió el país.
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El primer trimestre de este 2019 fue, quizás, uno de los más complicados en el sector compra-venta de inmuebles. Durante 2017 y principios de 2018 se produjo una reactivación en el mercado inmobiliario que estuvo motorizada por la accesibilidad a los créditos hipotecarios. La situación cambió después de mayo del año pasado, cuando se desplomaron las operaciones a causa de la debacle económica que vivió el país.
Hubo dos hechos que provocaron un cóctel explosivo: el aumento en el precio de las propiedades y la caída del poder adquisitivo de los salarios alejaron a la gente del sueño de una vivienda. La crisis económica y la suba en la tasa de interés de referencia complicaron el acceso a un crédito hipotecario.
Un salteño que quiere acceder a un departamento de 70 metros cuadrados necesitará 200 salarios mínimos. Según un informe de la inmobiliaria RE/MAX, el precio promedio de un departamento es de 56.275 dólares, algo así como $2.504.237 (tomando como referencia el valor del dólar del Banco Central, que el 19 de junio era de $44,50)
Para comprar una casa de casi 100 metros cuadrados se requieren 77.038 dólares ($3.428.191). Obtener una vivienda de esas características implica tener 274 salarios mínimos.
No mejoró
El director del Colegio Inmobiliario de Salta, Juan Martín Biella, precisó a El Tribuno que no ha mejorado el mercado inmobiliario. La compra y venta están complicadas pero se invirtió la relación. Ahora aumentó la oferta, mientras que en los años anteriores la demanda era muy superior.
"Este 2019, por el momento es peor que el año pasado. Inclusive en lo que es fideicomiso o pozo, se han realizado muy pocas operaciones, porque eso se hace con el ahorro del interesado y la capacidad de ahorro ha disminuido. Hay muy poca gente que pueda ahorrar esa plata para meterse en un pozo", comentó el empresario.
Expresó que el precio de las viviendas está en baja si se pone como referencia el dólar. "Las viviendas han aumentado su valor en pesos después de la devaluación pero no han acompañado al dólar. Las viviendas se han pesificado en su gran mayoría, excepto lo que es campo, locales comerciales en el microcentro y algunos terrenos, el resto está pesificado", comentó.
Aclaró que existe un poder alto de negociación y el comprador que tiene el dinero en efectivo puede conseguir buenos precios. "Si cada uno pone el precio que quiere, no vende", añadió.
Juan Biella también afirmó que los compradores no tienen acceso al crédito. "Esta línea Procrear que ha salido es para un segmento muy pequeño de la sociedad salteña. Nada que ver con el primer Procrear. En esa época te quedaba igual o menos de lo que pagabas de alquiler, esa era la gran ventaja del crédito UVA, pero aun con el subsidio estos créditos son casi inaccesibles para la mayoría de los salteños, desgraciadamente", expresó.
Alquiler
En el sector comercial, Juan Biella también afirmó que se vive un año "muy complicado", donde se siguen desocupando locales pese a que no se han actualizado los montos de acuerdo a la inflación, sino mucho menos. Contó que los dueños de inmuebles alquilados para vivienda, al negociar para renovar el contrato, priorizan mantener un inquilino si es bueno.
"Estamos esperando el año que viene para ver si mejora un poco. Cuando creció el núcleo familiar es más complicado. La vivienda de barrio está, en promedio, 12 mil pesos y el núcleo familiar tiene ingresos por 30 mil pesos y es muy difícil alquilar, no porque no alcance, porque da más o menos la relación del 30%. Lo que pasa es que a las familias también les está costando mucho llegar a fin de mes", finalizó Juan Biella.
Informe de RE/MAX
El informe de RE/MAX expresa que hay un contexto en el cual el mercado inmobiliario evidencia una merma en las operaciones. En el primer cuatrimestre del 2019 se identificaron 1.700 transacciones menos que en igual periodo del año pasado, siendo 2018 un año de gran movimiento en el rubro por la alta oferta de créditos hipotecarios que reactivaron el sector con resultados extraordinarios.
El último mes muestra una tendencia ascendente en las operaciones registradas, con un crecimiento cercano al 20%. Esto no solo se evalúa en proporción con el mismo período del año pasado, sino también tomando el objetivo del mes como parámetro.
Si bien el precio del metro cuadrado publicado no experimenta una baja, contrariamente con lo sucedido en 2018, el comprador no está dispuesto a aceptar dichos valores, lo cual se ve reflejado en una disminución en el ticket promedio de las propiedades vendidas, generando en promedio un 12% de negociación entre el precio publicado y el de venta final.