Rodrigo Moisés Bonemann de 24 años, fue condenado a tres años de prisión condicional al ser encontrado culpable por el delito de crueldad animal. El joven deberá someterse a tratamiento psicológico y cumplir otras pautas de conducta.
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Rodrigo Moisés Bonemann de 24 años, fue condenado a tres años de prisión condicional al ser encontrado culpable por el delito de crueldad animal. El joven deberá someterse a tratamiento psicológico y cumplir otras pautas de conducta.
La jueza Norma Beatriz Vera, vocal de la Sala IV del Tribunal de Juicio, condenó a Rodrigo Moisés Bonemann a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional por resultar autor material y penalmente responsable de los delitos de actos de crueldad contra los animales y amenazas con arma en perjuicio de E. M. M., en concurso real.
La jueza le impuso a Rodrigo M. Bonemann las siguientes reglas de conducta por el término de tres años: fijar domicilio y someterse al cuidado del Patronato de Presos y Liberados ante el cual deberá presentarse cada 90 días para comunicar su lugar de residencia; realizar tratamiento psicológico previa indicación de un profesional idóneo sobre su necesidad y conveniencia y presentar la constancia del efectivo cumplimiento de la medida en el término de 72 horas y, cada 30 días, las que acrediten su realización; efectuar tareas que le sean asignadas por el director del lugar que contribuyan al aseo o mantenimiento edilicio de la Dirección General de Bienestar Animal y Tenencia Responsable dependiente de la Municipalidad de la Ciudad de Salta, ello por el espacio de cuatro horas semanales, fuera de sus horarios habituales de trabajo, por el término de un año, y presentar ante el tribunal las constancias que acrediten el cumplimiento de la medida dispuesta; prohibición de acercarse y de mantener contacto por cualquier medio con la denunciante y con su familia. Todo ello con expreso apercibimiento de revocarse la condicionalidad de la pena dictada.
En el mismo fallo, Bonemann resultó absuelto del delito de amenazas con arma por el que también llegó a juicio, en perjuicio de R. P. A., por no mediar acusación fiscal.
La causa se originó por un hecho sucedido en septiembre del año pasado. Bonemann fue acusado de golpear con un machete a un perro en la vía pública. El animal fue sacrificado momentos después por un veterinario, ante la gravedad de las heridas que presentaba.
Al momento del hecho, el joven fue interceptado por una mujer que intentaba que deje de agredir al perro, pero la habría amenazado con el machete.
Su accionar quedó registrado en un video que rápidamente se viralizó y generó gran conmoción en la sociedad salteña por la crueldad hacia perrito que fue bautizado como Benjamín. Incluso hubo marchas para visibilizar el hecho.