¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

18°
26 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

En el Papa Francisco se necesitan monitores para 20 de 32 respiradores

Sin este equipamiento no se puede controlar el ritmo cardíaco.
Miércoles, 20 de mayo de 2020 02:37

Desde que se declaró la pandemia por el coronavirus, en la provincia se viene trabajando para que ante un eventual brote por COVID-19 el sistema de salud no colapse y pueda tratar a los pacientes que vayan ingresando.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Desde que se declaró la pandemia por el coronavirus, en la provincia se viene trabajando para que ante un eventual brote por COVID-19 el sistema de salud no colapse y pueda tratar a los pacientes que vayan ingresando.

Al inicio de esta emergencia se el hospital Papa Francisco se convirtió en el centro de referencia para la atención de COVID-19 y se realizaron mejoras de infraestructura para fortalecer sus recursos. En la actualidad, hay 12 camas de terapia intensiva operativas.

Además, hay 20 respiradores más, pero faltan los monitores, que elevarán a 32 el número de camas para la atención de pacientes críticos.

En la ciudad de Salta, entre el sistema público y privado de salud, hay aproximadamente 200 camas de terapia intensiva que cuentan con respiradores que podrían atender pacientes críticos con coronavirus.

Para los pacientes de baja complejidad, se sumaron 50 camas en la escuela ARA General Belgrano, que depende del hospital. Se suman 160 camas que se instalaron en el Centro de Convenciones. En total, en la ciudad de Salta hay más de 2.000 camas que podrían ser utilizadas para esta pandemia.

Sin monitores

Ricardo León de la Fuente, jefe de terapia intensiva del Papa Francisco, contó que "los respiradores trabajan solos, pero los monitores son los que te van indicando cómo está el paciente".

"Te dice continuamente cómo está el ritmo cardíaco, cómo está la presión, porque son pacientes críticos y vos no podés tener un paciente con respirador sin monitor; es otra cosa, pero es indispensable. Un respirador puede trabajar de manera independiente pero si no tenés el monitor no podés controlar al paciente de manera adecuada. Sería imposible tener un enfermero controlándole los signos vitales todo el tiempo", afirmó.

Solo COVID-19

En el momento que se determinó que el Papa Francisco iba a ser el centro de referencia para coronavirus, los vecinos de Solidaridad se inquietaron y se manifestaron en contra de esa medida. Sin embargo, con la situación epidemiológica de Salta, esas protestas fueron mermando.

"El barrio está mucho más tranquilo, hoy no se ve ninguna escena de hostilidad entre los vecinos y eso que están en el hospital Papa Francisco alojados los únicos casos de COVID-19. Por lo menos hasta ahora no volvió a haber ninguna manifestación en contra del hospital", expresó Ricardo León de la Fuente.

El jefe de terapia intensiva del Papa Francisco comentó a El Tribuno que el policlínico por el momento sigue estando afectado para la atención de pacientes por COVID-19 y que todas las consultas que no sean relacionadas al coronavirus se siguen derivando a los 33 centros de salud que dependen de esta área operativa.

"Así que los pacientes que tienen otras patologías deben consultar en los centros de salud que dependen de esta área operativa. El hospital no cambió su esencia desde que se declaró la pandemia por el coronavirus", destacó el médico.

Pacientes en el hospital

Desde el inicio de la pandemia por coronavirus, en Salta se realizaron 874 test de los cuales solo cinco dieron positivos de COVID-19.

Ricardo León informó a El Tribuno que tres casos ya fueron dados de alta y los dos pacientes restantes están internados en el hospital ubicado en el barrio Solidaridad, que funciona como centro de referencia COVID-19.

Además, hay dos personas con indicadores sospechosos a los que se les hicieron los test y están esperando los resultados.

Los casos

El cuarto caso de COVID-19 positivo fue el de un trabajador golondrina que regresó desde Río Negro y aún continúa internado. A los 14 días de internación, el resultado volvió a darle positivo, por lo que quedó alojado una semana más, para que se cumplan los 21 días de aislamiento. El lunes se le realizó un nuevo test, ya que finalizaron las tres semanas, y en el hospital están a la espera de los resultados para ver si se "negativizó" para darle de alta. El paciente está totalmente asintomático.

El quinto caso positivo de COVID-19 fue le de una mujer de 29 años, oriunda de Salta, que residía hace dos años en la provincia de Santa Cruz, y está internada en el Papa Francisco. Cuando se instaló en la provincia, estaba cumpliendo la cuarentena en un domicilio de Rosario de Lerma.

En este caso, a la mujer le dio positivo al día 14, por lo que se le volvió a realizar el hisopado este el lunes, cuando se cumplieron las tres semanas.

Dos casos en estudio

En el hospital Papa Francisco también hay dos casos sospechosos más. A los pacientes ya se les realizaron las muestras de hisopado y están esperando los resultados.

Uno forma parte del personal de salud y, por los síntomas que presenta, parece no tener coronavirus. También se hizo el análisis a una joven que trabaja en Aunor como personal de seguridad, que tuvo contacto estrecho con personas que llegaron de provincias con circulación comunitaria de COVID-19 y está con síntomas.

La terapia intensiva del hospital está vacía ya que ningún paciente internado presenta un cuadro de gravedad.

El personal de salud

El médico Ricardo León de la Fuente se refirió al trabajo que realizan los profesionales de la salud en el hospital Papa Francisco. “El personal de salud se termina afectando de una u otra manera, si no se contagia, tiene una gran carga emocional por estar trabajando en esto”, expresó. El profesional comentó que sería distinto si al médico solo le correspondiera atender y correr él el riesgo. “Muchas veces el personal que trabaja acá siente que indirectamente puede estar implicando a sus seres queridos cuando vuelven a sus casas”, aseguró. 
Esto sin dudas los carga de tensión y de cierta congoja al cumplir con sus tareas. Ricardo León destacó que desde el hospital están trabajando para hacerlo un lugar seguro. “Se sienten contenidos de tener todos los materiales. Cuando ven que disponen de todas las medidas de protección les da seguridad”, finalizó.
 

.

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD