¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

16°
25 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Trump busca una nueva Guerra Fría

Miércoles, 20 de mayo de 2020 02:37

Jeffrey Sachs, considerado uno de los economistas más influyentes del mundo, ve un panorama sombrío para América Latina y el escenario global. Cuando publicó en 2005 su libro "El fin de la pobreza", algunos lo consideraron demasiado optimista por creer posible erradicar la indigencia de la faz de la Tierra. Pero ahora, en medio de una de las peores pandemias y crisis económicas globales en varias décadas, cuesta percibir el optimismo de este renombrado experto en desarrollo sostenible de la Universidad de Columbia y de Naciones Unidas.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Jeffrey Sachs, considerado uno de los economistas más influyentes del mundo, ve un panorama sombrío para América Latina y el escenario global. Cuando publicó en 2005 su libro "El fin de la pobreza", algunos lo consideraron demasiado optimista por creer posible erradicar la indigencia de la faz de la Tierra. Pero ahora, en medio de una de las peores pandemias y crisis económicas globales en varias décadas, cuesta percibir el optimismo de este renombrado experto en desarrollo sostenible de la Universidad de Columbia y de Naciones Unidas.

"Esta pandemia es extraordinariamente grave", dice Sachs en una entrevista con BBC en español. "Va a empujar a cientos de millones de personas a la pobreza".

Sachs, quien ha sido señalado por distintas publicaciones como uno de los líderes o economistas más influyentes del mundo, fustiga la respuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la crisis de COVID-19 y lo ve como un intento de crear una Guerra Fría con China.

"Ahora economía es salud pública. Si se controla esta pandemia, se restaura la vida cotidiana y económica. Si la pandemia no se controla y seguimos propagando el virus alrededor del mundo, si afecta mucho a los países pobres y a los países de ingresos medios, los impactos económicos durarán años y serán muy graves. Si tenemos una crisis financiera, una crisis de salud pública y una crisis geopolítica, tendremos otra era de Gran Depresión", dice Sachs. "Si esos impactos económicos muy graves conducen a una crisis financiera, lo cual es una posibilidad real porque muchos países corren el riesgo de no poder pagar sus créditos internacionales o enfrentan una desestabilización financiera muy importante en sus economías, eso multiplicará los efectos.

Sus definiciones son drásticas: "Tenemos un liderazgo terrible en EEUU, un liderazgo miserable en Brasil, un mal liderazgo para esta crisis en México. Muchas economías emergentes están comenzando a verse muy afectadas, y todo esto podría llevar a un desastre creciente. Estamos justo en el momento en que hacemos una buena salud pública o nos enfrentamos a trastornos económicos que durarán años. Y me temo que estamos yendo más en dirección de esto último".

La pandemia está aumentando la brecha entre ricos y pobres en un mundo que ya era bastante desigual.

América Latina

América Latina avanzó en la reducción de la pobreza en los primeros años de este siglo, pero la tendencia se revirtió con el fin del boom de las materias primas y ahora la región enfrenta esta crisis. ¿Hay un riesgo de que desaparezca la nueva clase media que surgió en Latinoamérica? "La única noticia positiva para gran parte de América Latina es que hay regiones productoras de alimentos. Por lo tanto, debería haber comida en muchos países y en la región. Pero piense en cuántos países están muy afectados en este momento. Brasil está tan desastrosamente gobernado que ya estaba en crisis, pero con Bolsonaro se está convirtiendo en una crisis aún más profunda porque el gobierno federal es, como en EEUU, incoherente y de escasa ayuda para detener la epidemia más allá de lo que hacen los gobernadores estatales. Sabemos que Ecuador y Perú se enfrentan a un fuerte impacto de la epidemia. Es probable que México suceda lo mismo porque Andrés Manuel López Obrador ha estado básicamente en negación, como Trump y Bolsonaro".

México ya se encuentra en una terrible crisis porque el presidente puso -de manera inexplicable- todas las fichas en Pemex (Petróleos Mexicanos, una entidad estatal), justo cuando el mercado petrolero se derrumba. Chile, el lugar más estable y mejor gobernado en la región, se incendió el año pasado con las protestas por la creciente desigualdad. Eso fue antes del COVID-19.

"Es el peor escenario que hemos visto en la región en mucho tiempo. Y, dada la falta completa de cooperación internacional y la incapacidad absoluta del gobierno de Trump de hacer algo constructivo en cualquier frente, ya sea doméstico o internacional, uno no puede ser demasiado optimista sobre la escena latinoamericana en este momento".

Los EEUU de Trump

En EEUU, el país más rico del mundo, hay 15 millones de personas al borde del hambre y los latinos y afroamericanos son los más afectados por el COVID-19.

Jeffrey Sachs habla sin cortapisas. "La primera regla es no tener un psicópata como presidente. Tenemos el peor presidente en la historia de EEUU. Esto ya era obvio para quienes observaron de cerca en los últimos tres años. Pero este hombre es absolutamente venal, narcisista, ignorante y desafortunadamente se interpuso en el camino de la mínima cordura en la respuesta a esta crisis. Por eso EEUU tiene más de 80.000 muertos, un colapso completo de nuestros sistemas de salud pública y una incapacidad absoluta de este país rico y poderoso, lleno de talento, para hacer lo mínimo: obtener máscaras faciales y rastrear contactos de personas infectadas".

El economista es categórico: "No hacemos lo básico en EE.UU. Y luego, la idea brillante de este hombre es dejar de financiar a la OMS en medio de una pandemia global: absolutamente destructivo. Está mentalmente trastornado. Pasa cada día en su cuenta de Twitter atacando a personas aquí y allá, acusando al expresidente (Obama) y a China de terribles crímenes. EEUU perdió por completo el rumbo al tener a este hombre como presidente".

Sachs añade: “Creo que durante un tiempo las élites poderosas lo vieron como una especie de idiota útil: recortó sus impuestos, aumentó la oferta de dinero, el mercado de valores estaba en alza... Pero no se puede tener esta combinación de narcisismo maligno e ignorancia en medio de la peor crisis de la historia moderna. Y eso es lo que tenemos, desafortunadamente”. Este año hay elecciones presidenciales en Estados Unidos. “Trump es un timador y un propagandista”. Tiene una máquina de propaganda que, dice Sachs, alcanza el 40% del público. Esa es la base de Trump, la ha tenido desde el principio y parece que todavía la tiene, 80.000 muertes después.

El ejemplo oriental 

“Lo que recomiendo a todos los países es mirar lo que ha sucedido en la región de Asia-Pacífico”, dice el economista. “China detuvo la transmisión del virus, no al 100% pero de forma sustancial. Corea ha hecho lo mismo: sí, hay brotes, pero muy localizados. Taiwán, Hong Kong, Vietnam, Australia y Nueva Zelanda han hecho lo mismo. Si fuéramos gente pensante, estaríamos preguntando: ¿cómo lo hicieron? ¿Por qué no podemos hacerlo? Bueno, hay una respuesta fundamental para esto y se llama ‘Salud Pública’. Significa observar de cerca los síntomas de las personas. Cuando muestran síntomas, les haces test. Cuando dan positivo, ves si pueden aislarse de forma segura en su hogar o si deberían ponerse en cuarentena en una instalación pública, que Asia ha utilizado con mucho éxito. Trump es tan ignorante y destructivo que en sus conferencias absurdas el problema ni siquiera surge”.

 Jugando con fuego 

Al parecer, EEUU se está retirando de su papel de líder mundial y cada país tiene su propia estrategia contra esta pandemia. “La actitud de Trump es tratar de romper el sistema internacional en su médula, romper la Organización Mundial del Comercio, retirarse de cualquier tratado, romper los acuerdos de armas, gastar billones o más en una nueva generación de armas nucleares. Ahora todo esto está en el contexto de la más profunda crisis económica desde la Gran Depresión y una crisis de salud global que no tiene precedentes, al menos desde la epidemia de gripe de 1918. Y lo que quiere hacer es usar esto como una ocasión para instigar una nueva Guerra Fría con China”.
La pandemia puede alterar el tablero geopolítico global. “EEUU tiene mucho poder a través del dólar y de los sistemas de armas. El propósito es usar incluso esta crisis para crear una nueva Guerra Fría intencionalmente, no por accidente, por destino o por resignación a la realidad, sino por intención. Porque China se estaba volviendo demasiado poderosa a los ojos de estos nacionalistas y neoconservadores. Lo encuentro peligroso y ridículo, pero especialmente peligroso”.
El riesgo es una sombra de depresión muy larga. En ese diálogo, Jeffrey Sachs consideró creíble “que la profundidad de la Gran Depresión en sí misma fue un reflejo de la falta de liderazgo global en la década de 1930. Gran Bretaña era demasiado débil para liderar, EEUU no estaba interesado en liderar, Weimar estaba en retiro, Hitler llegó al poder en enero de 1933 y la Gran Depresión se profundizó porque no hubo cooperación. Aquí estamos un shock de igual magnitud, aunque en una etapa muy temprana: es posible recuperarse rápido. Y la recuperación principal tendría que comenzar por la salud pública. Y luego por la limpieza financiera”.
 

 

PUBLICIDAD