Según consta en el requerimiento, el imputado atentó contra a integridad sexual de la damnificada de 14 años, al desplegar actos corporales de contenido esencialmente sexual y en contra de la voluntad de la niña al valerse de su fuerza física.
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Según consta en el requerimiento, el imputado atentó contra a integridad sexual de la damnificada de 14 años, al desplegar actos corporales de contenido esencialmente sexual y en contra de la voluntad de la niña al valerse de su fuerza física.
Así, resulta que durante la tarde de un viernes de junio de 2019, la menor, por encargo de su madre, se dirigió hasta el negocio donde estaba el acusado. Luego de que ingresara, el imputado cerró la puerta con llave, agarró a la víctima de los brazos y la llevó por la fuerza hasta una habitación, donde cometió el abuso.
La denuncia fue radicada por la madre de la menor, luego de que el director de la escuela a la que asiste la niña le comunicara sobre lo sucedido y que la menor cursaba el quinto mes de embarazo.
Es que la menor pudo contarle a su profesora sobre lo sucedido y ésta avisó de inmediato al director, que citó a la madre de la víctima.