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El 39% de los niños que asisten a merenderos tiene sobrepeso

Preocupa la malnutrición por exceso de niños y adolescentes en los barrios vulnerables de la ciudad. Buscan fomentar la educación alimentaria y huertas familiares y comunitarias.
Lunes, 04 de enero de 2021 00:38

Un 39% de los niños, niñas y adolescentes que asisten a merenderos de barrios vulnerables de la ciudad tienen malnutrición por exceso. De ese porcentaje, un 23% presenta sobrepeso y un 16% obesidad. En tanto un 8% sufre un déficit alimentario.

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Un 39% de los niños, niñas y adolescentes que asisten a merenderos de barrios vulnerables de la ciudad tienen malnutrición por exceso. De ese porcentaje, un 23% presenta sobrepeso y un 16% obesidad. En tanto un 8% sufre un déficit alimentario.

Del total de niños con insuficiente alimentación, un 6% tiene bajo peso y un 2% desnutrición. El 53% restante está en valores normales de acuerdo a su edad.

Los datos se desprenden de un informe sobre el estado nutricional de la población que recibe asistencia alimentaria. El estudio se realizó en el marco de un convenio de colaboración entre el Centro Nacional de Investigaciones Nutricionales (CNIN) y la Municipalidad de la Ciudad de Salta.

Desde mediados de 2020 se evaluó la situación nutricional de 253 niños y adolescentes que concurren a los merenderos comunitarios de los asentamientos y barrios Parque La Vega, Siglo XXI, Vélez Sársfield, Divino Niño, Villa el Sol, Solidaridad, San Antonio y Santa Ana.

Los merenderos en donde se encontró mayor porcentaje de malnutrición por exceso fueron Villa El Sol, con un 26% de sobrepeso y 23% de obesidad y Santa Ana, con un 12% de sobrepeso y un 33% de obesidad.

Mientras que por el bajo peso y la desnutrición los que más preocupan son los números de los merenderos del asentamiento Parque La Vega, donde se registra un 6% de niños y adolescentes con desnutrición e idéntico porcentaje con bajo peso también. En Siglo XXI existe un 7% de bajo peso y un 4% de desnutrición y en Vélez Sársfield, un 11% de bajo peso.

Según indicadores

Las evaluaciones se realizaron según los estándares de la Organización Mundial de la Salud (2007). Se utilizó el indicador peso/edad para los niños de 0 a 5 años y para la población mayor de 5 y de hasta 18 se empleó el indicador Índice de Masa Corporal (IMC). Los datos fueron procesados mediante el software OMS Anthro y Anthro Plus versión 3.2.2, 2011.

Durante la presentación del estudio que se llevó a cabo hace unos días, el director de CNIN, Carlos Ubeira, destacó el trabajo conjunto con la Municipalidad, particularmente con la Secretaría de Deportes y Juventud, la Subsecretaría de Salud y Ambiente Humano y el Observatorio de la Ciudad, para llevar a cabo el relevamiento en los ocho merenderos.

"Para nosotros es importante poder trabajar con quienes toman las decisiones, porque la función de los organismos de ciencia y tecnología es identificar problemas sociales de manera objetiva para que esos datos e información recolectados, sirvan para elaborar políticas públicas", sostuvo Ubeira.

La subsecretaría de Salud y Ambiente Humano, Mónica Torfe, explicó que los resultados del informe se asemejan a los obtenidos en estudios nacionales, en los que el problema nutricional de mayor prevalencia es el sobrepeso y la obesidad en la población infantojuvenil con asociación entre la malnutrición por exceso y la pobreza.

El problema se asocia a una alimentación de baja calidad nutricional, en la que la cantidad de alimentos no es el factor determinante del estado nutricional, sino la calidad de los mismos.

El elevado consumo de hidratos de carbono o azúcares prevalece ante la baja calidad de las proteínas dietéticas, como así también el aporte de vitaminas y minerales.

Enfermedades

La subsecretaria Mónica Torfe señaló que una alimentación no adecuada trae como consecuencia que la gente sufra enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes, obesidad, hipertensión y enfermedades cardiovasculares. Se trata de patologías que se pueden prevenir.

"Para resolver el problema es fundamental la educación alimentaria y nutricional en la comunidad y tenemos que trabajar desde que el alimento se produce hasta que se consume. Es importante trabajar en políticas públicas y legislación que tiene que ver con la formulación de alimentos", recalcó.

Los azúcares, grasas y sodio en exceso son nocivos para la salud. Por el contrario las verduras, frutas, carnes, cereales y alimentos integrales son saludables.

La funcionaria añadió: "En las escuelas no hay quien enseñe sobre alimentación saludable. Nosotros tenemos contenidos. Si bien por la pandemia no se pudo lograr, estamos detrás de poder llegar a los establecimientos educativos, quioscos y trabajar activamente".

Destacó la importancia de la implementación de huertas familiares y comunitarias para el aporte de nutrientes esenciales: proteínas de buena calidad, vitaminas, minerales y fibra.

"Muchas personas ya tienen huertas en sus hogares, incluso quienes viven en departamentos cultivan en macetas. La verdura se puede producir en casa", indicó y agregó que otro punto importante es la actividad física regular ya que el sedentarismo es otro factor que implica riesgo de sufrir diferentes enfermedades.

Incluidos en el plan Unidos

La encargada del Observatorio de la Ciudad, Carla Arévalo, informó que los merenderos relevados están incluidos en el plan Unidos y recibían ciertos días de la semana insumos de diferente tipos y alimentos como pan, sándwiches, leche y mate cocido.

Por protocolos de prevención de la COVID-19, y para evitar las concentraciones, las familias retiran los alimentos del lugar y los consumen en sus hogares.

El plan había sido puesto en marcha por el Gobierno de la Ciudad en abril de 2020 para brindar asistencia a los vecinos que, por la emergencia sanitaria y el aislamiento social preventivo por COVID-19, se veían imposibilitados de trabajar.

Arévalo expresó que los resultados del estudio fueron contrarios a lo que se pensaba en relación a la falta de alimento y la lucha contra el hambre. "No se detectó déficit de alimentos o nutricional sino malnutrición por exceso: obesidad y sobrepeso. Eso es alarmante por las consecuencias que puede tener en la vida adulta".

Tras las conclusiones del relevamiento se empezaron a dictar talleres de alimentación saludable y compra responsable, dirigidos a beneficiarios de la Tarjeta Alimentar, a cargo de la Subsecretaría de Promoción Social, Inclusión y Discapacidad. "Tenemos previsto seguir haciendolos", dijo Arévalo.

Durante la presentación del estudio, profesionales especialistas en nutrición y educación física de la Municipalidad, recibieron los certificados de la capacitación en Antropometría, que se dictó este año, a partir del convenio firmado con el CNIN. Es que los profesores de educación física de planta permanente de la comuna fueron instruidos para la toma de medidas antropométricas.

"Esto es muy importante para la Municipalidad porque ya quedó instalada la capacidad y podrán monitorear en otras intervenciones a futuro", dijo Arévalo, quien añadió que relevamientos propios como el que se realizó son sumamente necesarios ya que no se contaba con datos anteriores sobre la problemática.

Ahora el municipio tiene información relevante para diagramar políticas públicas acordes a la realidad de cada familia y continuar con las intervenciones en los barrios más humildes de la ciudad.

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