Cuando la jornada parecía terminarse con poco pique, dejando con las ganas a más de uno, los encargados de dos catamaranes se calentaron y protagonizaron una violenta pelea. Pescadores de distintas embarcaciones que salieron de una de las bahías del dique Cabral Corral se trenzaron a golpes de puño en medio del imponente espejo de agua ubicado en Coronel Moldes. Además de los dueños de los dos catamaranes participaron otras personas e incluso pescadores circunstanciales. El grupo involucrado en la gresca terminó entrevistado por efectivos policiales y luego en el hospital zonal.
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Cuando la jornada parecía terminarse con poco pique, dejando con las ganas a más de uno, los encargados de dos catamaranes se calentaron y protagonizaron una violenta pelea. Pescadores de distintas embarcaciones que salieron de una de las bahías del dique Cabral Corral se trenzaron a golpes de puño en medio del imponente espejo de agua ubicado en Coronel Moldes. Además de los dueños de los dos catamaranes participaron otras personas e incluso pescadores circunstanciales. El grupo involucrado en la gresca terminó entrevistado por efectivos policiales y luego en el hospital zonal.
Con protocolo sanitario de por medio, por la situación de pandemia, desde que se levantó el permiso para ir a pescar y subir a una embarcación en el dique Cabral Corral los amantes de la pesca aprovechan cada salida. Ayer, cuando caía la medianoche, y se cumplía el horario de regreso estipulado para los botes pesqueros uno de los dueños se enojó por la maniobra que había realizado un colega, el encargado de la otra embarcación a quienes los pescadores suelen llamar cariñosamente "capitano".
Fue tanta la calentura que el hombre de 38 años movilizó la nave y fue en busca del presunto "irresponsable". Eran cerca de las 1 de la madrugada cuando ambos "capitanos" empezaron a insultarse y bravuconear, hasta ese momento el resto de los presentes oficiaban, cuales espectadores de lujo, el momento previo a un áspero combate. Según indicaron algunos de los pescadores a bordo "le reclamó la maniobra que hizo, ya que tuvo que pegar el timonazo para que no nos peguemos un palo". Los cierto fue que de los insultos no dudaron en pasar a las piñas y tres personas más se metieron en la batahola.
Varios de los implicados en la gresca, sobre todo los encargados, terminaron con lesiones leves, efectivos recepcionaron las denuncias que ambos grupos radicaron y elaboraron un informe policial. Intervino la fiscal Penal de El Carril desde donde se solicitó que todos fueran trasladados hasta el hospital local. Según trascendió las personas encargadas de las embarcaciones podrían recibir algún tipo de sanción dado el peligro al que expusieron no solo sus vidas sino la de terceros.
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