En temporada de frío, aconsejan realizar actividades físicas y aeróbicas en horarios en los que las temperaturas son más altas. “Salta, gracias a Dios tiene ese posibilidad. Es un clima en el que a las 8 de la mañana se registran bajas temperaturas, pero a partir del mediodía y hasta inclusive las 17 o 18 es bastante agradable y es posible realizar deportes con total normalidad y tranquilidad”, explicó la Lic. en Educación Física, Cora Lewis.
En un marco en que las medidas preventivas por la pandemia de Covid 19 son imprescindibles, todo lo que hace a las actividades individuales son totalmente recomendables, como caminatas, trote, etc, ya que permiten generar anticuerpos, señaló Lewis.
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En temporada de frío, aconsejan realizar actividades físicas y aeróbicas en horarios en los que las temperaturas son más altas. “Salta, gracias a Dios tiene ese posibilidad. Es un clima en el que a las 8 de la mañana se registran bajas temperaturas, pero a partir del mediodía y hasta inclusive las 17 o 18 es bastante agradable y es posible realizar deportes con total normalidad y tranquilidad”, explicó la Lic. en Educación Física, Cora Lewis.
En un marco en que las medidas preventivas por la pandemia de Covid 19 son imprescindibles, todo lo que hace a las actividades individuales son totalmente recomendables, como caminatas, trote, etc, ya que permiten generar anticuerpos, señaló Lewis.
“En lo personal cuando salgo a correr y hace mucho frío, inicio con el barbijo puesto tapando la zona de la boca y nariz, para que el aire no afecte la zona de la garganta. Por lo menos hasta que uno entra en calor y después uno ya puede quitárselo”
Destacó, además, la importancia de ser guiados o asistidos por un profesional en Educación Física. “Si por el contrario, la persona decide hacerlo de forma autónoma porque quiere salir a correr, es aconsejable siempre realizarse controles médicos, para ver si está condiciones, sobre todo la parte cardíaca. Hay que buscar el horario adecuado, cuando las temperaturas no son tan bajas ni tan altas, y hacerlo de forma progresiva”, explicó. En este sentido, señaló que la gradualidad es la clave y permite que el cuerpo vaya dando las señales, si avanzar o disminuir el ritmo. Esto es algo que el profesional sabe dosificar.
“Tampoco se debe obviar entrar en calor antes de comenzar, con movilidad articular, acondicionando el cuerpo para comenzar con la rutina. Respecto a la indumentaria, tomar en cuenta el calzado, que las zapatillas tengan un buen arco y plataforma, para evitar lesiones plantales o musculares. Usar ropa cómoda y no quedarse luego con la ropa transpirada. Hay que abrigarse una vez concluida las actividades. La hidratación también es fundamental”.
Los especialistas explican, que cuando la temperatura exterior es muy baja, la pérdida de calor es mucho menor puesto que el cuerpo la necesita para mantener su propia temperatura. Por eso en otoño-invierno se suda menos. Al necesitar más tiempo para elevar la temperatura hay que asegurarse de preparar bien a otros tejidos blandos como tendones y ligamentos, que con temperaturas más frías pueden estar menos laxos y por lo tanto hay que prepararlos bien con el objetivo de evitar lesiones.
Para quienes recién inician, Lewis señala que caminar 20 minutos es lo indicado, a lo que se puede sumar movimientos de brazos, cambiar el ritmo de la caminata, trechos en punta de pie, con los talones ayuda a trabajar los distintos grupos musculares.