El coronavirus estalla en Brasil y la Copa América, sus futbolistas y allegados al máximo torneo continental no son la excepción, agudizando la polémica por la elección de la Conmebol del país vecino como sede para la competencia.
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El coronavirus estalla en Brasil y la Copa América, sus futbolistas y allegados al máximo torneo continental no son la excepción, agudizando la polémica por la elección de la Conmebol del país vecino como sede para la competencia.
Son 52 los casos positivos que se reportaron hasta el pasado lunes, día del partido entre Argentina y Chile en Río.
Los afectados son jugadores, miembros de delegaciones y prestadores de servicios como trabajadores de hoteles o choferes de vehículos oficiales, informó ayer el Ministerio de Salud brasileño. De acuerdo a un comunicado de este mismo organismo, 42 infectados son jugadores y miembros de delegaciones y 10 empleados de apoyo de Brasilia, donde el domingo se inauguró la Copa luego de la baja de las sedes originales, Argentina y Colombia.
El ministro de Salud, Marcelo Queiroga, dijo que colombianos, venezolanos y bolivianos habían dado positivo.
Las personas que dieron positivo fueron aisladas en un hotel de Brasilia y los extranjeros pueden dejar el país tras la cuarentena y test negativo PCR.
En un día se sumaron 11 casos, según el comunicado divulgado el martes. El Ministerio de Salud local informó que fueron realizados 2.927 test de PCR en la Copa América, y que la positividad fue del 1,70 por ciento, cuando hasta el domingo la incidencia era del 1,40 por ciento.
Las muestras de laboratorio -hechas en el sector privado por Conmebol- deben verificar aún a qué variante corresponden los casos positivos, lo que tiene una demora de 14 días.
Los futbolistas, por protocolo, son testeados cada 48 horas.
Brasil se encuentra en situación crítica en la ocupación hospitalaria de la mayor parte del país, según revela el laboratorio oficial Fiocruz.
Brasil tiene acumulados 488.228 muertos y más de 17,4 millones de casos.
El promedio móvil de muertes volvió al nivel del 11 de mayo, al subir a los 1.973 decesos diarios tomando en cuenta las últimas siete jornadas, en coincidencia con las proyecciones de que el país podría sufrir el riesgo de una tercera ola.
Martins, contra Conmebol
El delantero boliviano Marcelo Moreno Martins, quien no pudo debutar con su seleccionado tras dar positivo en coronavirus, aseguró que la organización del certamen en Brasil a pesar de la pandemia y la gran cantidad de contagios refleja que a la Conmebol “solamente le importa el dinero”.
En su cuenta de Instagram, la estrella boliviana posteó la noticia que publicó un medio brasileño sobre los 52 contagios de COVID-19 en Brasil vinculados a la organización del torneo.
“Gracias a ustedes Conmebol. Toda la culpa es de ustedes”, escribió el goleador, para a renglón seguido completar: “¿Y si se muere una persona qué van a hacer ustedes? Les importa es solamente el dinero. ¿La vida del jugador no vale nada?”.
Moreno Martins fue uno de los cuatro casos de coronavirus que sufrió Bolivia y que no pudieron jugar en la caída 1-3 ante Paraguay, en Goiania.
Fabra, de emergencia
El defensor de Boca Frank Fabra fue citado de urgencia para sumarse a la Selección de Colombia, debido a la baja por COVID de Juan Ferney Otero.
La Selección regresó al país y espera a Cuti Romero
El seleccionado argentino regresó ayer al país luego del debut con empate 1-1 ante Chile en Río de Janeiro, quedó concentrada en el predio de Ezeiza y luego realizó el primer entrenamiento de cara al partido del viernes ante Uruguay.
La atención hoy y mañana estará puesta en la recuperación del defensor Cristian “Cuti” Romero, quien arrastra una sobrecarga en el muslo izquierdo.
La Selección se entrenará hasta mañana en el predio y después viajará a Brasilia en vuelo chárter. El partido contra Uruguay se disputará en el estadio Mané Garrincha, a las 21, y quedó confirmado ayer que el brasileño Wilton Sampaio será el encargado de controlar el esperado clásico rioplatense.
El famoso tuit de la polémica
El titular de la Asociación de Fútbol de Chile, Pablo Miland, dijo ignorar el tuit que la cuenta oficial hizo sobre Argentina con tono irónico y provocador, y aclaró que su entidad no maneja esa red. En Twitter habían parodiado la canción “La Mano de Dios” para resaltar el debut en la roja del inglés Ben Brereton ante la albiceleste.