Miembros de las organizaciones sociales que estuvieron en la zona del monumento a Güemes el miércoles, durante la noche del homenaje por el bicentenario de su muerte, aseguran que están siendo utilizados políticamente. Luego de que se difundiera un video en el que se ve a una columna de militantes pasar el vallado que se había colocado en la avenida del Bicentenario porque las actividades debían a hacerse con público restringido, fueron el blanco de cuestionamientos de distintos sectores y salieron a dar su versión. Dicen que los dejaron ingresar para luego demonizarlos, que no fueron al acto sino al hotel donde estaba Alberto Fernández y que nadie cuestiona las concentraciones contra el Presidente que hubo la misma noche.
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Miembros de las organizaciones sociales que estuvieron en la zona del monumento a Güemes el miércoles, durante la noche del homenaje por el bicentenario de su muerte, aseguran que están siendo utilizados políticamente. Luego de que se difundiera un video en el que se ve a una columna de militantes pasar el vallado que se había colocado en la avenida del Bicentenario porque las actividades debían a hacerse con público restringido, fueron el blanco de cuestionamientos de distintos sectores y salieron a dar su versión. Dicen que los dejaron ingresar para luego demonizarlos, que no fueron al acto sino al hotel donde estaba Alberto Fernández y que nadie cuestiona las concentraciones contra el Presidente que hubo la misma noche.
Integrantes de la Corriente Clasista y Combativa, Somos Barrios de Pie y el Movimiento Evita se concentraron alrededor del monumento desde la tarde del miércoles. Según contaron, ahí estuvieron hasta minutos antes de la tradicional Guardia bajo las Estrellas, cuando se les permitió ingresar hasta las inmediaciones del hotel cercano al monumento a Güemes donde se hospedaba Alberto Fernández para que allí los saludara.
La situación generó que el presidente del COE (Comité Operativo de Emergencia), Francisco Aguilar, renunciara. El funcionario argumentó que no estaba planificado que las agrupaciones accedieran a este lugar y criticó que no se realizaron las actividades que sí estaban pautadas con protocolos de prevención, como los fogones en la noche previa al 17 de junio. A eso se sumaron cuestionamientos de la Agrupación Tradicionalista Gauchos de Güemes, cuyo titular aseguró que los actos tradicionales fueron avasallados por lo político.
En tanto, lo mismo creen quienes participaron del saludo al Presidente. "Se politizó el homenaje", resaltó la diputada nacional por el Frente de Todos Verónica Caliva. La legisladora insistió en que ningún militante estuvo en la zona del acto sino que fueron hacia el hotel.
"Nadie dice nada de la marcha anticuarentena. En toda la zona de la avenida del Bicentenario había diferentes grupos, como los gauchos", indicó. Aseveró además que el cuestionamiento a los simpatizantes del Presidente es un uso de las organizaciones.
"Se tiene que hacer cargo Pulleiro porque él abrió la valla, él dio la orden para que se abriera la valla. Se permite pasar y luego se demoniza a los militantes, para justificar... para usarnos de chivo expiatorio", sostuvo la diputada.
Agregó que "hay sectores que creen que Güemes les pertenece solo a ellos, que cualquier cosa parecida al pueblo participando, los pone a salir a buscar culpables, a hacer una caza de brujas. Los compañeros que están en las organizaciones sociales son los que fueron su milicia, los gauchajes pobres que eran los peones. No estas familias de elite que hoy siguen en el poder, que son contra quienes él peleaba".
Lo mismo advirtieron desde el Movimiento Evita. "Había solo pura gente de clase media alta insultando a los trabajadores. Yo llegué tarde y no pude entrar. Me insultaron e increparon y, de eso, los medios no hablan", aseguró Marta Garnica, referente del Frente de Mujeres Evita.
"Estoy de acuerdo que renuncie Pulleiro", aseguró por su lado Marcela Miranda de Somos Barrios de Pie. "Las organizaciones no compartimos sus decisiones desde siempre", dijo.
Los anillos
Según explicaron quienes participaron del saludo al Presidente, el tercer anillo, a cargo del Ministerio de Seguridad provincial, fue donde les permitieron el ingreso para ir hacia el segundo anillo. “Al segundo anillo llegamos encolumnados de a 4, cumpliendo los protocolos de distancia y barbijo.
Porque éramos menos de 100 personas, que es lo que está permitido al aire libre”, advirtió la diputada nacional Verónica Caliva, que tiene su raíz política en las organizaciones.
En cuanto a que no se realizaron actividades tradicionales como los fogones, Caliva despegó una situación de la otra y responsabilizó a Francisco Aráoz de la Agrupación Tradicionalista. “Es mentira que los gauchos no pudieron ingresar. Con los gauchos en el monumento, él esperó al Presidente, lo increpó y se llevó a los gauchos”.
Desde las diferentes organizaciones sostuvieron que querían llegar hasta el Presidente para agradecer la asistencia en pandemia y por el reconocimiento a la figura del héroe gaucho.