Con un total de 60 personas fallecidas desde el inicio de la pandemia, el departamento de General Güemes se encuentra en un momento donde los casos positivos siguen acumulándose, pero con una importante caída en el porcentaje de pacientes graves, lo que es un gran alivio para el sistema sanitario local.
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Con un total de 60 personas fallecidas desde el inicio de la pandemia, el departamento de General Güemes se encuentra en un momento donde los casos positivos siguen acumulándose, pero con una importante caída en el porcentaje de pacientes graves, lo que es un gran alivio para el sistema sanitario local.
Cada una de esas vidas que se perdieron a causa de la COVID-19 generó un gran dolor en sus seres queridos y en parte de la comunidad. Hubo personas que fueron valiosas en vida por su total entrega a la tarea que desarrollaban, entre las cuales podemos destacar la figura de José Mazzucco, un joven que contando con solo 33 años dejó su vida en la batalla contra el virus.
Mazzucco era muy conocido por su tarea como locutor y conductor, solía ser el elegido para animar festivales, corsos o actos oficiales, hizo radio y televisión. A fines del 2019 fue convocado para formar parte del gabinete que iba a acompañar -como director de Prensa- al recientemente asumido intendente Sergio Salvatierra.
Con el inicio de la pandemia, ya en el 2020 fue nombrado como director del COE Güemes, función que lo llevó a estar constantemente expuesto al virus. Se desenvolvió con mucha eficiencia en su cargo: estaba a disposición de la comunidad las 24. El buen trabajo realizado en el COE lo llevó a ser nombrado en marzo de este año como director de Defensa Civil, área de reciente creación.
Mazzucco sintió los primeros síntomas el pasado 28 de abril y fue internado con síntomas respiratorios el 29. Su estado de salud fue muy variable, presentando cierta mejoría por momentos. Las primeras atenciones las recibió en el hospital Joaquín Castellanos, donde fue asistido con un respirador y toda la medicación correspondiente. Una semana después fue trasladado a la clínica Virgen de Urkupiña en la ciudad de Salta. Falleció el pasado 16 de mayo.
Su deceso causó una gran conmoción en la sociedad güemense, ya que se trataba de un joven sin ninguna patología preexistente. Para combatir la enfermedad utilizaron plasma, ibuprofeno y hasta fue entubado, pero no pudieron salvarlo.