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16 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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El desafío de la Educación Sexual

Martes, 25 de octubre de 2022 01:47

Las instituciones educativas deben ser espacios de convivencia social pacífica y armónica, en los que se promueva una cultura de paz y de no violencia entre las personas y en contra de cualquiera de los actores de la comunidad educativa, así como la resolución pacífica de conflictos en todos los espacios de la vida personal, escolar, familiar y social.

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Las instituciones educativas deben ser espacios de convivencia social pacífica y armónica, en los que se promueva una cultura de paz y de no violencia entre las personas y en contra de cualquiera de los actores de la comunidad educativa, así como la resolución pacífica de conflictos en todos los espacios de la vida personal, escolar, familiar y social.

El gran desafío en la escuela es desarrollar una educación de valores situados desde el paradigma del desarrollo moral, negando la existencia de valores absolutos, independiente de ideologías, partiendo del supuesto de que las personas crecen mediante la consideración sistemática de dilemas morales.

La Ley de Educación Nacional, N° 26206, establece en su art. 11 brindar una formación ciudadana comprometida con los valores éticos y democráticos". Y en el art, 127, "los deberes de las y los estudiantes: el respeto a la libertad de conciencia, convicciones, dignidad, intimidad, colaborando con la mejora de la convivencia escolar".

Por lo tanto, atendiendo a estos deberes de las políticas educativas es que se plantea una propuesta que impulsa el desarrollo moral a través de la participación reflexiva de ideas propias y respeto de las ideas de los demás.

Es necesario asumir la tarea de educar la dimensión moral con el objetivo de formar, fortalecer y desarrollar sujetos con criterio y capacidad para respetar al otro sin perder su identidad y sus principios. La formación de valores en las jóvenes generaciones es una necesidad de toda sociedad. Por lo tanto, la escuela como institución socializadora debe asumir junto con la familia esta responsabilidad.

En este marco de educación moral, que acompaña toda formación, también esta atendida la educación sexual. Y, al respecto, Michel Foucault en su libro "Historia de la sexualidad", sostiene que "la represión sexual propia de la era victoriana no había hecho otra cosa que hacer de la sexualidad un discurso omnipresente. De la sexualidad no se hablaba, pero estaba, y está, en todas partes".

La educación sexual requiere de un marco ético, de una orientación valórica, dado que la sexualidad se vive de acuerdo con la propia conciencia, con los propios valores. Esto implica cultivar pudor, templanza, respeto propio y ajeno en el marco de los derechos humanos.

Al educar jóvenes en sexualidad no se trata de reprimir o permitir conductas sexuales sino de formar un espíritu crítico, entregando elementos de análisis y enseñando a tomar decisiones u opciones constructivas en lo personal y social.

El desarrollo moral les permitirá buscar sus propias respuestas y determinar en forma informada, libre, consciente y responsable cómo vivir su sexualidad de acuerdo con sus propios proyectos de vida.

Hoy, 25 de octubre, se llevará a cabo la jornada provincial de "Educar en igualdad, prevención y erradicación de la violencia de género" ( Resol. 185/22), en todas las escuelas de todos los niveles educativos, con el objetivo de que estudiantes y docentes "desarrollen y afiancen actitudes, saberes, valores y prácticas que contribuyan a prevenir y erradicar la violencia de género". Tratamiento que se debe llevar a cabo a lo largo de todo el período lectivo acompañando el desarrollo de los contenidos de Educación Sexual Integral.

Importante oportunidad la de esta jornada, para sensibilizar y generar conciencia, abordar y asumir una responsable actitud ante la violencia de género y la ESI, desde el desarrollo de la dimensión moral de niñas, niños, adolescentes y jóvenes y docentes de nuestra provincia.

*Profesora en Filosofía. Especialista en mediación educativa

 

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