Tras el sendero de recuperación por el que había transitado desde la segunda mitad de 2020, en Salta el mercado inmobiliario cerró el primer trimestre del año con marcadas caídas en la cantidad de compraventas y el valor promedio de las operaciones.
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Tras el sendero de recuperación por el que había transitado desde la segunda mitad de 2020, en Salta el mercado inmobiliario cerró el primer trimestre del año con marcadas caídas en la cantidad de compraventas y el valor promedio de las operaciones.
El mal comienzo de año del sector quedó reflejado en un informe que acaba de publicar el Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea con las variables de sectores relevantes de la economía regional.
En la plaza salteña, durante los primeros tres meses de 2022, se registraron 878 transacciones, lo que significó una caída del 26% en comparación con la cantidad de operaciones que hubo de enero a marzo en 2021. El indicador, a su vez, expresó una suba del 19,3% con respecto a 2020.
En marzo último se formalizaron en la provincia 322 compraventas de inmuebles. Ese volumen fue 34,7% más bajo que el del tercer mes de 2021.
En cuanto a montos, la caída fue aún más notoria. Las operaciones del primer trimestre de 2022 totalizaron $1.714.503.493, cifra 41% más baja que los $2.909.774.126 que movió el mercado inmobiliario local de enero a marzo de 2021, aunque con respecto al mismo parcial de 2020 hubo un repunte del 21,6%.
En marzo de 2022 el monto de las operaciones efectuadas ascendió (en valores corrientes) a $821 millones, cifra 1,4% inferior a la del mismo mes de 2021. En relación con los registros de febrero último, el total de marzo fue 62,1% mayor. Este salto abrupto, según se indicó desde el Colegio de Escribanos de la Provincia de Salta, obedeció a una compraventa récord de inmuebles con hipoteca impulsada por el crédito hipotecario.
En términos reales, el monto de las transacciones realizadas durante el primer trimestre de este año fue 62% menor que el del mismo período de 2021 y quedó 54,2% por debajo del de 2020.
Juan Lucas Dapena, economista jefe del Ieral NOA, aclaró que las caídas "no deben entenderse puramente como una baja en el valor de los inmuebles, sino que existen otros factores que influyen en el comportamiento decisor de los consumidores, como ser no invertir en la adquisición de inmuebles y sí en la compra de activos financieros que garanticen una mejor cobertura frente a la escalada inflacionaria del país".
Consumo de cemento
Entre enero y marzo de este año el NOA registró un consumo de cemento 10,6% mayor que el del primer trimestre de 2021. Todas las provincias de la región, salvo Jujuy, mostraron este indicador del sector de la construcción en ascenso, con Salta (20,2%) y Tucumán (19,4%) a la cabeza de la variación interanual. Un menor dinamismo en la recuperación reflejaron Catamarca (8,1%), Santiago del Estero (5,1%) y La Rioja (2,5%).
Siempre en comparación a igual período, el consumo de cemento a granel creció en Salta un 24,3%, marcando además un salto notorio respecto a 2020, al pasar de 8.930 a 17.084 toneladas.
A su vez, el consumo medido por bolsas creció un 6,4% en el NOA. Dentro de ese promedio, solo mostraron variaciones positivas Tucumán (24%) y Salta (19%), mientras que otras provincias tuvieron una contracción significativa. La caídas fueron del 9,1% en Jujuy, 6,7% en Santiago del Estero y 4,3% en La Rioja.
Dapena remarcó que, particularmente para la provincia de Salta, "la actividad de la construcción durante el primer trimestre de 2022 vio una evolución positiva en relación a la de años previos".
El economista de la Fundación Mediterránea resaltó que, a diferencia del sector inmobiliario, el de la construcción (medido en términos de consumo de cemento) logró mantener un crecimiento sostenido desde el segundo semestre de 2020