En la segunda jornada de audiencias, el imputado Federico Sánchez, acusado de abuso sexual con acceso carnal en uno de los tres casos, tuvo que volver a salir de la Sala V del Tribunal de Juicio para que ingresara una de las víctimas. En el primer día el acusado también abandonó la pieza donde el juez Marcelo Rubio lleva a cabo el juicio unipersonal contra el relacionista público.
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En la segunda jornada de audiencias, el imputado Federico Sánchez, acusado de abuso sexual con acceso carnal en uno de los tres casos, tuvo que volver a salir de la Sala V del Tribunal de Juicio para que ingresara una de las víctimas. En el primer día el acusado también abandonó la pieza donde el juez Marcelo Rubio lleva a cabo el juicio unipersonal contra el relacionista público.
G.M.P. fue una de las personas que prestó testimonio ayer, al igual que su madre y su hermana, en la silla se sentó también la psiquiatra del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), y el excuñado de la víctima, dueño del boliche donde trabajaba el imputado en 2012. Para la jornada de hoy seguirán las testimoniales entre las que se espera la de la psicóloga.
En el caso son tres las denunciantes, G.M.P., A.V.M. y R.L.Y., y solo por la primera la causa se elevó a juicio, es la mujer que declaró ayer ante el magistrado, las otras dos denunciantes están en calidad de testigos, mujeres que acusaron a Sánchez de haberlas drogado, una de ellas, R.L.Y. de 16 años al momento del hecho, en la primera jornada dijo que se salvó de ser violada porque estaba junto a otras amigas, y A.V.M. sostuvo que fue drogada y entregada a un amigo del acusado, quien la habría abusado sexualmente.
Modus operandi
El fiscal que interviene en la causa, Federico Obeid, le consultó a G.M.P. por qué decidió denunciar en 2021, teniendo en cuenta que el hecho denunciado habría ocurrido en 2012, la víctima explicó que "nunca me olvidé de eso, siempre lo tuve adentro, está presente", sostuvo.
Al mismo tiempo agregó que al tomar conocimiento que el primo de Federico Sánchez, el exdiseñador de modas Pablo Rangeón, estaba siendo juzgado por abusar sexualmente de seis mujeres -fue condenado a siete años de prisión en perjuicio de una de las víctimas-, se comunicó con la primera denunciante a través de Instagram para decirle que ella sí le creía.
Que Sánchez había usado el mismo modus operandi con ella, la drogó y luego la violó, con lo cual le dijo que había que detenerlos para que no hubiera más víctimas. El texto del mensaje enviado en 2021 fue leído por la mujer ante el Tribunal de la Sala V, ubicada en el segundo piso del Poder Judicial de esta capital, a cargo del juez Marcelo Rubio.
El show debía continuar
La declaración del excuñado de la víctima, dueño en ese momento del boliche donde trabajaba Sánchez, dejó entrever que tanto él como su expareja, hermana de la víctima, sabían lo que el imputado "había hecho y hacía" pero como "llevaba mucha gente" no hicieron absolutamente nada. El acusado siguió trabajando en ese lugar varios años más.