La crisis social y económica que se vive, golpea fuertemente a los que menos tienen. Basta con mirar la difícil situación del asentamiento “San Javier”, ubicado en la zona sudeste de la capital. En donde, habitan más de 300 personas en condiciones de extrema vulnerabilidad. Es por eso, que hace tres años un grupo de vecinas decidieron juntarse, y con el apoyo de Cáritas Argentina y la Municipalidad, abrieron el comedor “Las Morenas”, para brindar un plato de comida a más de 250 familias.
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La crisis social y económica que se vive, golpea fuertemente a los que menos tienen. Basta con mirar la difícil situación del asentamiento “San Javier”, ubicado en la zona sudeste de la capital. En donde, habitan más de 300 personas en condiciones de extrema vulnerabilidad. Es por eso, que hace tres años un grupo de vecinas decidieron juntarse, y con el apoyo de Cáritas Argentina y la Municipalidad, abrieron el comedor “Las Morenas”, para brindar un plato de comida a más de 250 familias.
Jessica Lamas, vecina encargada, contó que el comedor funciona hace tres años. Fue creado por familias del lugar junto a Cáritas Argentina con el apoyo de la municipalidad. Y expresó: “La anterior gestión, nos brindaba el pan, mercadería, verduras y lo necesario para poder cocinar. Sin embargo, hace más de tres semanas que no contamos con este importante apoyo para darle de comer alrededor de 250 familias”.
Las consecuencias de la crisis económica
Y agregó: “Lamentablemente y con la crisis que estamos viviendo el comedor no se encuentra funcionando. El 30 de diciembre se acercó el actual intendente y le pedimos que por favor vea el tema de la comida, ya que son más de 180 niños los que están sufriendo por la extrema pobreza que se vive aquí. Por el momento no tuvimos ninguna respuesta. Le pedimos por favor al municipio que tengan consideración ante nuestra necesidad, el hambre no espera los tiempos de los políticos”.
La cruda realidad de las familias
En tanto, Carina Santos, vecina y voluntaria de la cocina, relató: “Nosotros normalmente cocinamos dos veces por semana para las familias del asentamiento y también para los chicos que están en situación de calle cerca del vertedero”.
Luego expresó: “Antes podíamos brindarles pan, comida y hasta un pequeño postre, todo lo que nos mandaban lo entregamos. Nuestra realidad es muy cruda. Estamos en medio de la contaminación y no lo elegimos. Esto es porque no nos quedo otra alternativa. Es triste que no nos den una respuesta, no sabemos que decirles a los chicos que vienen y nos piden comida. Vemos que los precios suben y no se llega a fin de mes, a duras penas pasamos las fiestas. Esperamos que tengan algo de sensibilidad y nos vuelvan a dar apoyo”.
Sobre el asentamiento “San Javier”
El asentamiento “San Javier” existe hace 3 años en la zona sudeste de la ciudad de Salta. Como consecuencia de la pandemia que se vivió, el número de familias que llegaron al lugar fue creciendo de forma progresiva. Según detallaron, muchos se volcaron al lugar, por no poder afrontar el precio de los alquileres y vivir en situación de hacinamiento. Al tratarse de un sector no habitable, por encontrarse a metros del vertedero San Javier, no cuentan con los servicios básicos como luz, agua, cloacas y seguridad.