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La mesa ya está puesta.
Después de varios días de elaboración, las alumnas de Jannet Javier, profesora de cocina y repostería de la escuela San Ignacio Loyola de Cerrillos, armaron su mesa de ofrendas para sus seres queridos. Desde el martes, el grupo de estudiantes cocina y arma sus ofrendas, y aprende de la mano de la profe, el significado de cada una de ellas.
Este jueves, la mesa ya quedó lista. Las formas aprendidas, con figuras de los animales de la casa, la escalera, la corona, todo con la masa aprendidas. Tambiés estuvieron los postres elegidos por los seres queridos que ya no están como la mazamorra, el anchi, las empanadillas, y por supuesta las empanadas salteñas.
La mesa convertida en altar, fue el lugar de recepción para la foto de los seres queridos que ya no están.
Y en este proceso de producción y armado, no faltaron los recuerdos. "Varias de mis alumnas fueron recordando las recetas de sus mamás, de sus abuelas, lo que le gustaba al abuelo. Recordar a los seres queridos que ya no están, de esta forma es una manera más de volver a encontrarse en familia", expresó la profesora Jannet que también realizará su mesa en su casa, y ya planifica, que se hará el próximo año en la clase que dicta en el colegio.