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Al menos 68 migrantes murieron y 75 siguen desaparecidos después de que una embarcación que transportaba a más de 150 migrantes africanos naufragara en el mar Arábigo, frente a la costa de la provincia de Abyan, al sur de Yemen, informaron este domingo fuentes yemeníes.
Un funcionario local, que pidió no ser identificado, informó a Xinhua que la embarcación volcó la noche del sábado, alrededor de las 23:00 hora local (20:00 GMT), debido a los fuertes vientos.
Los equipos de campo recuperaron más de 68 cadáveres de las costas de las ciudades de Shaqra y Zinjibar la mañana de este domingo, mientras que 12 sobrevivientes fueron rescatados y trasladados al Hospital General de Shaqra para recibir tratamiento, indicó el funcionario, añadiendo que decenas de migrantes siguen desaparecidos.
Recuperan los cuerpos
Un comunicado de la Dirección de Seguridad de Abyan indicó que las fuerzas de seguridad llevaron a cabo una amplia operación humanitaria para recuperar los cuerpos de un gran número de migrantes indocumentados de origen etíope, que se ahogaron al intentar ingresar ilegalmente a territorio yemení a bordo de embarcaciones de contrabando desde el Cuerno de África.
Según el comunicado, las autoridades han comenzado a transportar los cuerpos a hospitales en Zinjibar como parte de los intensos esfuerzos de rescate y humanitarios, a pesar de los recursos limitados.
Varios cadáveres fueron encontrados dispersos en diferentes zonas costeras, lo que aumenta la preocupación de que más víctimas pueden desaparecer en el mar.
Piden detener el flujo migratorio ilegal
Las autoridades de seguridad de Abyan instaron a todas las organizaciones locales e internacionales pertinentes a intervenir urgentemente y tomar medidas para detener el flujo migratorio ilegal a través de las aguas territoriales yemeníes, de acuerdo con el comunicado.
Los migrantes africanos siguen llegando a Yemen, a donde se enfrentan a condiciones extremadamente duras en un país que sufre un conflicto de una década de duración, descrito por las Naciones Unidas como una de las peores crisis humanitarias del mundo.