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La decisión adoptada por el Concejo Deliberante de General Mosconi desató una fuerte controversia en una de las localidades con mayores niveles de desocupación de la provincia de Salta. Seis de los nueve concejales votaron a favor de duplicar sus dietas, que pasarán de 2 a 4 millones de pesos mensuales, mientras que otros tres ediles se opusieron a la medida.
El aumento salarial se da en un contexto marcado por la crisis económica y la creciente demanda social. Mosconi forma parte del departamento San Martín, una región donde las dificultades laborales, la asistencia insuficiente y los reclamos de comunidades originarias —que en reiteradas ocasiones se manifestaron sobre la Ruta Nacional 34— forman parte de la agenda cotidiana.
La información, que comenzó a circular de manera extraoficial, fue confirmada por la intendenta Ana Guerrero Palma, quien anticipó que hará uso de la facultad de veto. Sin embargo, el incremento podría quedar firme si el Concejo logra reunir una mayoría simple para rechazar esa decisión, tal como lo prevé la normativa vigente.
Además del aumento de las dietas, el cuerpo deliberativo avanzó con la designación de unas 60 personas en distintos cargos, entre ellos secretarios de bloque y asistentes. La combinación de ambas decisiones abrió interrogantes sobre el impacto presupuestario y el origen de los recursos necesarios para afrontar esas erogaciones, un aspecto que, según se indicó, no fue explicitado durante el tratamiento del tema.
Desde el Ejecutivo municipal se señaló que el aumento de las dietas no solo alcanza a los concejales, sino que también se extiende automáticamente a la intendenta, secretarios y directores. En ese marco, se advirtió que el municipio enfrenta serias dificultades para equilibrar las cuentas mensuales y sostener nuevos gastos permanentes.
Otro punto que sumó tensión institucional fue la sanción de una resolución —la número 009-2025— firmada por la presidenta del Concejo, Norma Cabral, y el exsecretario de Acción Social Santos Barrios. Mediante esa norma, se dejaron sin efecto todas las resoluciones dictadas por el cuerpo deliberativo anterior entre el 10 de diciembre de 2023 y el 10 de diciembre de 2025, una decisión que generó dudas sobre su alcance y consecuencias administrativas.
La intendenta expresó que desconoce los motivos por los cuales se anuló la totalidad del trabajo legislativo previo y remarcó que muchas de esas resoluciones ya fueron ejecutadas o se encuentran plenamente vigentes. El tema suma así un nuevo capítulo de conflicto entre el Ejecutivo y el Concejo Deliberante.
Mientras tanto, el foco político y social permanece puesto en la definición que pueda tener el veto anunciado. Si el cuerpo deliberativo insiste con el aumento, los concejales pasarán a percibir las nuevas dietas desde diciembre, en un escenario que continúa generando rechazo y cuestionamientos en la comunidad.