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Una de las voces más escuchadas- por sus investigaciones- entre los industriales y los especialistas argentino para el análisis económico de la industria es Bernardo Kosacoff. Es director de la oficina de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) en Buenos Aires y encargado del área de Estrategias Empresarias y Competitividad. Docente y disertantes en distintas universidades del país y del exterior.
En la reunión de la UIA en Salta coordinó un panel en el que habló el empresario Cristiano Ratazzi en el que se habló del rol de las economías regionales.
Al final del mismo, mantuvo un diálogo con El Tribuno. Sostuvo que “en el país urge bajar los precios del mercado interno y reducir los costos industriales para ganar competitividad en la producción manufacturera”.
“Se debe cumplir desde la política económica con el mejoramiento de la eficiencia de la economía y cuidar la distribución de los ingresos. Aún queda margen técnico para evitar algunos ruidos en la economía y creo que los temas centrales para administrar mejor las variables tienen que ver con la búsqueda de ciertas consistencias”, agregó e insistió en que “hay que desacelerar los precios y bajar los precios productivos”.
Al referirse a las políticas sociales, fue enfático: “tenemos que hacer una mejor evaluación de los fuertes subsidios que otorgamos que son muy importantes pero -como todos sabemos- deben cumplir con el rol de llegar a la eficiencia para llegar a los sectores más humildes”. Al ser consultado por la “sintonía fina” que se anunció desde la autoridad económica nacional, Kosacoff dijo que “se debe considerar la actual restricción de dólares que es importante, pero con las expectativas del 2013, fruto de las mayores exportaciones agrícolas y automotrices a Brasil, sumadas las necesidades de que pagaremos menos vencimientos de deuda externa el año que viene, podemos hacerlo”. Reflexionó que “así podremos tener más divisas para no perjudicar a ningún proceso productivo. La Argentina debe recuperar en el largo plazo los elementos centrales de la acumulación de capital vía exportaciones incrementado así el empleo calificado y, por suerte, la falta de dólares no es una crisis estructural que tenga Argentina. En la economía nacional puede haber márgenes muy importantes para que esta restricción de divisas no afecte al proceso de inversión ni al proceso productivo”.
En otro orden, Kosacoff ante el evento de una reforma constitucional opinó que “sería la oportunidad de incorporar la necesidad de un desarrollo nacional que garantice que no habrá asimetrías regionales. Esto es un punto importante, porque la Argentina tiene una alta heterogeneidad en todos los planos: en términos productivos, sociales y también en términos regionales. Cuando uno piensa un desarrollo inclusivo en el largo tiempo, este desequilibrio territorial debe superarse”.
Sobre las diferencias de ingresos entre regiones, el economista agregó que “hay una serie de asimetrías de bienestar en la Argentina, observadas en las áreas que menos se desarrollaron, deben resolver eso; no son favorables para el crecimiento. Debe ponerse todas las acciones de la política económica y todas las del sector privado para reducir esta brecha que es fundamental para hacer posible el desarrollo inclusivo”.
“Hay una visión acertada desde el interior del país -dijo- que afirma que la Argentina profunda está con su economía primarizada y, desde la pampa húmeda hacia abajo se concentran las inversiones industriales. Cuando uno analiza los criterios de la asignación de las inversiones aparecen asimetrías que favorecen notablemente a otras regiones y no a las más postergadas. Estas zonas tienen problemas de infraestructura y les cuesta más hacer el transporte de sus productos a los grandes centros comerciales. Tienen menos externalidades o factores externos positivos para poder contar con una producción más diversificada”.
Al hacer un sintético diagnóstico de la economía regional tipo en Argentina, Kosacoff llegó a la conclusión que “hay algunas economías regionales que les falta complejidad en su producción, no pueden innovar y muchos menos calificar y formar recursos humanos. Debemos resolverla hoy a estas asimetrías porque el futuro comienza hoy”.