inicia sesión o regístrate.
Y hoy llegará el “día D” del confederal de la CGT y se sabrá si realmente Hugo Moyano tiene los congresales necesarios para sortear la tormenta interna.
Ayer los sectores antimoyanistas, “gordos”, barrionuevistas e independientes, se declararon en rebeldía y decidieron boicotear la reunión del comité confederal convocada por el sector cercano al líder camionero, en la que se deberá definir la elección de la nueva conducción.
Desde la sede del gremio de la construcción (Uocra), el titular de los estatales y vocero del sector de los independientes de la CGT, Andrés Rodríguez, fue el encargado, junto al sanitarista Héctor Daer, de anunciar el boicot al encuentro de hoy.
De la misma manera se encargó de develar la publicación, que se conocerá hoy en los principales medios, de una solicitada firmada por más de 70 gremios en la que se abogará por “la unidad cegetista”.
En el encuentro, además de los sindicalistas mencionados y del anfitrión Gerardo Martínez, estuvieron Luis Barrionuevo, los “gordos” Oscar Lescano, Carlos West Ocampo, y ex aliados de Moyano como Omar Viviani, Omar Suárez, Roberto Fernández (colectiveros) o José Luis Lingeri (obras sanitarias), y el metalúrgico Antonio Caló, que aspira a reemplazar a Moyano como secretario general de la Confederación General del Trabajo.
Lo cierto que en la otra vereda, en la oficial, Moyano cuestionó a los rivales en la interna de la Central Obrera de los Trabajadores, a quienes calificó como “los que apoyaron que fueran violados los derechos de los trabajadores” en la década del 90.
Al redoblar su apuesta y apostando todas sus fichas a un triunfo, aseguró ayer que: “Como el voto para elegir secretario general de la CGT va a ser secreto y directo, no solo nuestros delegados nos van a votar a nosotros, sino los delegados cuyos secretarios generales puedan determinar que voten a otro”.
Por su parte, el candidato kirchnerista para ocupar el sillón de calle Azopardo, Antonio Caló, ratificó su vocación por competir por la conducción de la CGT, y resaltó que “tengo que tratar por todos los medios de lograr la unidad, aunque si la circunstancias se dan y hay que confrontrar, vamos a confrontar”.
En la misma sintonía, Rodríguez destacó que entre los gremios reunidos ayer “descansa la representación de la mayoría de la CGT”, y aseguró que cuentan con “cerca del 70% de los congresales” que deben elegir mediante voto secreto, el 12 de julio, al nuevo titular de la central obrera.
Si bien el líder de los estatales aclaró que “de ninguna manera se busca una fractura del movimiento obrero”, resaltó que buscarán “bregar por la unidad y la auténtica normalización, legítima y legal de la CGT” y ratificó que tomaron como decisión “no concurrir hoy al comité central confederal” que convocó Moyano.
Tanto el portavoz del encuentro como otros referentes insistieron en cuestionar la legalidad y legitimidad de la convocatoria de Moyano, y contrapusieron ese tipo de decisiones con lo que pretenden que ocurra después de la elección del 12 de julio, al asegurar que “aspiramos a que la CGT se normalice como tiene que ser, con un cuerpo directivo y un secretario general que actúe colegiadamente, que actúe por consenso”. De todos modos, hoy se sabrá cuál será el futuro de la CGT.