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No es el primer caso que sucede en la Argentina, y, seguramente, no será el último, ya que estamos acostumbrados a la inconciencia que tienen algunos padres de prestarle el vehículo a sus hijos. Hace una semana atrás, un chico de 14 años se mató luego de recibir un auto de regalo de su papá.
Ahora, desde Misiones, llega la noticia de que la policía de esa provincia detuvo a un niño de 11 años manejando el automóvil de su progenitor.
Pero lo más insólito de este caso es que el propio chico le contó a los agentes de tránsito que fue el padre el que le prestó un Volkswagen Gol para que hiciera los mandados.
Pero esto no fue todo, cuando la policía ubicó al papá del niño, y lo hizo dejar su lugar de trabajo para ir a buscar a su hijo, se enojó cuando los uniformados le notificaron que deberá pagar una multa.
El hecho ocurrió a las 9, en un tramo de la ruta Provincial Costera 2, en el municipio de Aurora, en Oberá, Misiones. Los efectivos de tránsito recorrían la ruta cuando se sorprendieron al ver al menor conduciendo el Volkswagen Gol, lo hicieron detener y constataron que viajaba solo. El niño, de nombre Alejandro, quien reside a unos diez kilómetros del lugar donde fue detenido, comentó que habitualmente su padre le permitía conducir para hacer mandados y llevar a su mamá a realizar las compras.
Los uniformados fueron a buscar al padre al trabajo y cuando llegó al lugar se molestó porque deberá pagar una multa. “El señor se enojó mucho, lo que marca la inconciencia de muchos padres que tienen prioridades distorsionadas. Es inconcebible, muy grave autorizar a un niño de once años a manejar”, señalaron desde la fuerza policial. Además de la multa económica, el progenitor y propietario del vehículo sufrirá la quita de puntos en su carné de conducir, según reveló el diario El Territorio de Misiones.