La información tiene por ahora una sola fuente. Una pastora denunció en la Policía de San Carlos que un gran incendio avanzó sobre unas 200 hectáreas en la zona de La Ovejería -en medio de los cerros- y entre el fuego y el humo ella perdió 300 animales entre cabras y ovejas.
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La información tiene por ahora una sola fuente. Una pastora denunció en la Policía de San Carlos que un gran incendio avanzó sobre unas 200 hectáreas en la zona de La Ovejería -en medio de los cerros- y entre el fuego y el humo ella perdió 300 animales entre cabras y ovejas.
La demanda de Dionisia Escalante llegó al juez de Instrucción de Cuarta Nominación, Antonio Pastrana, quien envió una comisión a los cerros para que verificaran la extensión del incendio, posibles causas, daños y riesgos.
Desde la Policía y desde la Subsecretaría de Defensa Civil de la Provincia, advirtieron que la zona del incendio es prácticamente inaccesible. El lugar es en medio de los cerros del paraje La Ovejería, adonde sólo se puede llegar a pie, luego de caminar entre 8 y 10 horas.
Allí, como en casi toda la provincia, los incendios no se producen naturalmente y lo más común es que algún puestero inicie la quema de un pastizal para acelerar, como señala la creencia y la costumbre, el crecimiento del nuevo pasto.
Las condiciones climáticas ayer no eran propicias ni siquiera para enviar un avión hidrante o un helicóptero para combatir el fuego desde el aire.
Travesía e investigación
Efectivos de la Unidad Regional 6 de Cafayate, de Criminalística, de Bomberos y policías de San Carlos, subieron hasta la zona del incendio. Partieron el viernes, después de las 18 y llegaron ayer, alrededor de las 6 de la mañana, luego de caminar más de 11 horas.
“Dejamos al grupo cerca de las 18, en el paraje San Lucas, al pie del cerro; desde ahí tenían que escalar 45 kilómetros”, explicó el comisario principal Aureliano Guanca, jefe de la Unidad Regional 6.
Luego de la partida, la última comunicación telefónica con el grupo fue a las 4.30, en un sector del cerro donde había señal. “Nos informaron que aún tenían una hora de caminata”, agregó Guanca.
Una vez en el lugar, el grupo debía comenzar a recorrer la zona afectada por el fuego para, según la disposición del juez Pastrana, verificar la magnitud del incendio, determinar el posible origen, estudiar las zonas sobre las que podría extenderse ya que ningún equipo podrá subir para combatirlo, relevar las condiciones climáticas (en especial el viento que en los últimos días sopló muy fuerte en las zonas de altura) y visitar a los pobladores que viven más cerca del sector de riesgo.
Cumplida esta tarea, el grupo bajará hasta San Carlos y luego a Cafayate, donde deberá elaborar un informe al juez.
La denuncia
Dionisia Escalante llegó el último jueves a la noche a la subcomisaría de San Carlos. Extremadamente cansada y afectada por el humo y la ceniza, la mujer debió ser internada.
Luego de recuperarse, dijo a la Policía que en La Ovejería “se está quemando todo”. Relató que el fuego avanzó sin control y mató unos 300 animales, entre ovejas y cabras que pastaban. Al ver que nada podía hacer, decidió bajar y pedir ayuda.