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En barrio San Rafael la gente se siente cada día más estafada. Cuando parecía que al fin tendrían las escrituras de sus lotes, se enteraron de que estas saldrían, pero embargadas. Así lo denunció Guillermo Alvarez, un vecino que desde hace 12 años lleva adelante un juicio contra la inmobiliaria Antártida Argentina, que es la empresa que vendió los lotes. En las últimas horas, Alvarez comenzó a temer por la seguridad de su familia por reclamar lo que, afirma, por derecho le corresponde.
Alvarez adquirió en 1995, en buena fe, uno de los 930 lotes de la populosa barriada de la zona oeste de la ciudad, que ya depende del municipio de San Lorenzo. A pesar de que en mayo de 2006 la Justicia ordenó a Antártida Argentina que en un plazo de 180 días debía realizar los planos e infraestructura básica (de agua y luz), y luego escriturar el lote 18, manzana G de San Rafael, donde vive el hombre con su familia, la orden no se cumplió.
Por ello, según explicó Alvarez, “desde 2008 pesa sobre el deudor (la inmobiliaria) un embargo. Esto no es de ahora. Ya pasaron siete años, y como consecuencia, la sanción va aumentando”. Según se supo esta sanción ya ascendería a los 300 mil pesos.
Después de años de reclamos, movilizaciones y de olvido, hace unos meses, en el marco de la inauguración de una salita asistencial en Atocha, familias de San Rafael increparon al gobernador Juan Manuel Urtubey por las escrituras y una serie de obras públicas para el barrio. Ese día, Urtubey se comprometió a entregar dichas escrituras.
“Ahí vino la confusión. Se puso hasta fecha de entrega (el 11 de noviembre pasado) de las escrituras pero no se decía nada del embargo. Cuando nos dispusimos a buscar las pruebas nos dimos con una serie de irregularidades. Por ejemplo, en Inmuebles nos dieron cédulas parcelarias cambiadas y después incompletas”, señaló Guillermo Alvarez.
Agregó: “Pensamos que el intendente (Federico) Parra no estaba enterado de que pretenden entregar escrituras embargadas. Lamentablemente ahora nos dimos cuenta de que estaba al tanto de todo. Hoy, la estrategia de ellos es poner en contra nuestra a los vecinos echándonos la culpa del embargo”.
Con bronca e impotencia, Alvarez, que es chofer de larga distancia, aseguró: “Mi familia es víctima de amenazas de parte de punteros políticos de Parra. Ya no puedo trabajar tranquilo”. La familia Alvarez, que solicitó la inhibición general de bienes de Antártida Argentina, contó que el municipio de San Lorenzo cobra 300 pesos por gastos de escrituración, y al parecer, numerosos vecinos ya lo abonaron. Pero la duda sigue siendo ¿se va a levantar el embargo que pesa sobre Antártida antes de entregar las escrituras?