La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, designó ayer un nuevo interventor para el ferrocarril Belgrano Cargas, un transporte esencial para el desarrollo agroindustrial del norte argentino que viene sufriendo un proceso de deterioro y obsolescencia desde hacer tres décadas.
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La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, designó ayer un nuevo interventor para el ferrocarril Belgrano Cargas, un transporte esencial para el desarrollo agroindustrial del norte argentino que viene sufriendo un proceso de deterioro y obsolescencia desde hacer tres décadas.
Anoche, la primera mandataria anunció que se creará “una nueva sociedad anónima” en el manejo del Ferrocarril, que será operado por el Estado. Durante un acto en la Casa Rosada, la presidenta informó que se declaró “de interés público” las tarifas del transporte ferroviario de carga, asumiendo el Estado un rol "regulador".
El interventor es Marcelo Bosch y el hasta ahora Ferrocarril de carga y logística General Belgrano se llamará Ferrocarril de Carga y Logística General Belgrano, poniendo fin al actual contrato de gerenciamiento.
En 2006, el entonces presidente Néstor Kirchner había prometido una inversión mixta de unos setecientos millones de dólares para reconstruir siete mil kilómetros de vías y generar nueve mil empleos en todo el recorrido del Belgrano.
Luego llegaron Franco Macri, los inversores chinos y Hugo Moyano, pero el ferrocarril es cada vez más obsoleto. Un formación del Belgrano Cargas tarda 21 días en llegar desde Orán a Buenos Aires.
Sin embargo, la presidenta parece decidida a recuperarlo. Ayer reiteró el compromiso para la compra de algunos vagones y la restauración de otros. En la Argentina la mayoría de los ferrocarriles cargueros están en poder de empresas que deciden tener su propia línea para operar.
En 2011, Cristina había anunciado un plan para hacer 3200 km de vías nuevas, objetivo que no se concretó.
En junio, la visita del ex presidente chino Wen Jiabao, terminó con la promesa de un crédito de 11.430 millones de dólares a 15 años para trabajar en la reactivación.
El paquete accionario del Belgrano Cargas estaba en poder del Grupo Macri y el grupo chino Sanhe Hopefull; el grupo Roggio y EMEPA, de Gabriel Romero y los gremios La Fraternidad, Unión Ferroviaria y Camioneros.
La cuestión ferroviaria se tornó crítica hace un año, cuando la tragedia de Once dejó al desnudo la desinversión crónica. Ayer, la presidenta habló de mejoras en las vías urbanas y criticó a los usuarios “vandálicos”. “Yo no viajo en el tren Sarmiento. El que cree que me hace un mal a mí, le hace un daño a los trabajadores”, reprochó.
Denuncia contra la ONG Adecua
La presidenta formuló serias denuncias que involucraron a los bancos, a la Justicia y a la ONG Adecua. La titular de esta entidad, Sandra González, había denunciado meses atrás un acto de violencia de género de parte del secretario de Comercio Guillermo Moreno. Cristina dijo que Adecua hizo un acuerdo con bancos con homologación judicial y perjudicó a clientes que pedían indemnizaciones por 367 millones de pesos.
La jefa de Estado se hizo eco de un artículo publicado en el oficialista Página 12 y relató que la acción judicial se inició cuando una clienta de un banco reclamó a la ONG por el cobro indebido de una comisión, tras la cual se determinó que "más de 1.700.000 usuarios habían sido perjudicados por entidades que les cobraron de más por cargos y seguros. “Cuando se trata de funcionarios hay una cola larga de jueces para hacer justicia; cuando se trata de privados o de bancos, no. Hay que repensar la administración de la justicia”, dijo, para cuestionar al Poder Judicial.