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Una picadita en estas tardes cuando refresca, es el destino de varios grupos de amigos que buscan disfrutar de sus vacaciones.
Y cuando se habla de picadas, urgente surge la palbra “chacinado”.
Pero, ¿qué son los chacinados?
Podemos decir que los chacinados se dividen en cuatro grupos: frescos, secos, cocidos y salados.
Los frescos son aquellos que se preparan a base de carne y grasa cruda picada.
Pueden ser carnes bovinas, porcinas y otras autorizadas para el consumo humano.
En esta categoría están comprendidos los chorizos frescos, las longanizas, hamburguesas y salchichas.
Los chacinados cocidos son preparados a base de carne y grasa crudas, picadas y que pueden mezclarse con cueros de cerdo o carnes precocidas. A su vez, los chacinados cocidos se separan en “embutidos” y “no embutidos”.
Por ejemplo, entre los embutidos encontramos morcilla, mortadela, panchos, leonesa, salchichón y butifarra.
Entre los no embutidos al salchichón, el matambre, queso de cerdo y otros.
Los chacinados secos son preparados también a base de carne y grasas crudas picadas, especialmente las porcinas, y son sometidas a un proceso de maduración y desecación. Entre ellos se pueden encontrar al chorizo español, la longaniza y el salame.
En cuanto a los chachinados salados, éstos son elaborados con trozos de carne o tejido adiposo que han sufrido un proceso destinado a su conservación, mediante la acción de sodio en salazón seca o húmeda.
Podemos encontrar una gran variedad entre los chacinados saldos, como la bondiola, cabeza de cerdo, jamón crudo, jamón cocido, paleta tocino o lomito canadiense.
Finalmente, se denominan “fiambres” a los productos chacinados y salazones que se comercializan y consumen fríos.
Como se verá, es muy amplia la gama de productos a partir de la elaboración de carnes de cerdos y vacas. Las salazones son exclusividad para las carnes de cerdo, salvo escasas excepciones, aunque las carnes vacunas predominan en los chacinados.
Ambas especies son elegidas por el público argentino a la hora de encarar una de las tradicionales “picadas” de nuestro país.
Particularmente recomendamos los chacinados de cerdo, donde encontraremos el sabor que buscamos para esas tardes de vacaciones, donde el fresco de la hora nos pide reunirnos con amigos para pasar el verano.