Cuando la repostería se transforma en pequeñas obras de arte

Creatividad, innovadoras técnicas de decoración, pero sobre todo buen gusto en todo el sentido de la expresión se combinan para hacer de una torta de cumpleaños o un pastel de bodas una pequeña gran obra de arte. Programas de televisión vistos en todo el mundo como Ace of cake (As de tortas) que dirige Duff Goldman, la estrella de la pastelería de Baltimore, o Cake Boss, han dado un giro tan importante en la preparación de pasteles de especialidad, que una torta o las masas dejaron de ser solo un trozo de manjar. Así lo explica Andrea Quinto, con el entusiasmo propio de quien conoce del tema. Ella es una joven chef que en los últimos tiempos se volcó a la pastelería de diseño.
Logros impensados
Andy tiene 24 años, es mamá de un nene de 5 y como les sucede a muchas adolescentes, cuando nació su hijo necesitaba trabajar. "Comencé la carrera de chef y realmente lo que en principio era una necesidad laboral se transformó en una pasión. En principio, lo mío era la preparación de servicios de catering que sigo realizando, pero por iniciativa de mis abuelas, y aplicando las técnicas que aprendí en la carrera, comencé a incursionar en la pastelería", explicó esta joven mamá que reside en San Salvador de Jujuy pero que por sus propuestas innovadoras comenzó a expandirse con sus trabajos a todo el norte.
Andy comenzó preparando las primeras tortas de diseño a pedido de las mamás de los compañeritos del jardín de su hijo: "Comencé aplicando técnicas ya conocidas y otras más novedosas, a medida que me iba informando. Si bien soy chef, el próximo año voy a seguir formándome en pastelería porque quiero retribuir la confianza de la gente con mayor profesionalismo", señaló.
La joven no solo prepara con esas innovadoras técnicas las vedettes de las celebraciones que son las tortas, sino también las masas, las tartas, y prácticamente todo lo que comprende la mesa dulce. Pero preparar masas para 100 personas con la cara del Sapo Pepe o del ratón Mickey, o los super héroes no debe ser nada sencillo, tampoco preparar una torta con la figura de Bart Simpson sumergido dentro del pastel, un set de belleza para una quinceañera o un pastel cubierto con la colorida Wiphala (la bandera de los pueblos originarios). "Aprovecho para trabajar de noche, sola, muy tranquila porque necesito concentrarme en los mínimos detalles para que el trabajo final sea lo que el cliente y yo misma esperamos", explicó.
Para las técnicas de decoración Andrea utiliza fondant, merengues y cremas. La última tendencia son los petit four, mini tortas y mini tartas que se elaboran en serie. Además se imponen mucho los pop cake, una especie de chupetines rellenos de dulces o cremas que también son individuales y muy prácticos.