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La iniciativa, del senador Pablo Damián González, tuvo como fundamentos la necesidad de regularizar la situación de muchas familias vulnerables que ocuparon esas tierras y que, paulatinamente, fueron construyendo sus casas.
Los senadores aprobaron por unanimidad el proyecto para uso de esos terrenos, fueron declarados de utilidad pública y sujetos a expropiación, destinados a la adjudicación en venta a sus actuales ocupantes.
Son poco más de 2.000 personas las que se beneficiarán con las adjudicaciones de 470 lotes, ubicados en una extensión aproximada de 17 hectáreas y donde, además, las escrituras estarán exentas del pago de honorarios, impuestos, tasas y contribuciones.
"Tenemos que regularizar la situación de estas familias, permitiéndoles por este instrumento la titularidad de sus espacios, de vital importancia para quienes viven en el lugar", remarcó González.