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La abrumadora mayoría, un 43,44% de los encuestados -2.131 votos-, respondió que se debe centrar la política municipal en pavimentación, repavimentación y bacheo. Un 11,41% solicitó transparencia, mientras que un 10,15% requirió priorizar la lucha contra las adicciones. Un 8,7% requirió que se organice el tránsito, incluyendo las bicisendas y los semáforos. En quinto lugar, ya solo con el 5,85%, se abogó por la problemática de los animales abandonados.
De esta manera, puede observarse que el estado de las calles es una preocupación latente, que tiene como aliciente que en la época estival poco puede hacerse a causa de las lluvias. Entonces, en este aspecto, los primeros meses de gobierno de Gustavo Sáenz se verán eclipsados por una demanda de la población que no podrá ser atendida cabalmente.
No obstante, el presupuesto municipal para 2016 oscila los 2.000 millones de pesos, que se destinarán fundamentalmente en las siguientes áreas, según confirman allegados al intendente: personal -sobre todo salarios-, y servicios, que abarcan la obra pública, la recolección de residuos, la conservación del patrimonio histórico de la ciudad, de los espacios verdes y de recreación, entre otras cosas.
Como todo proceso que se inicia, el gobierno de Sáenz se enfrenta en primer lugar con los lastres del pasado, y en segunda instancia con la necesidad de imprimirle una impronta propia a su gestión. Esto último, aún más imprescindible en este caso ya que es la primera experiencia ejecutiva del ex candidato vicepresidencial del Frente UNA.
Las herencias
Sobre el primer aspecto, hay que destacar que en los últimos meses de gobierno de Miguel Isa se puso el foco en un plan de recuperación de calzadas que se popularizó en la promesa del actual vicegobernador sobre no dejar ningún bache en la ciudad. Además se enfocó en otras dos cuestiones, por una parte en el desarrollo de la oferta educativa, canalizada en la Escuela de Artes y Oficios tanto como en los Centros de Integración Comunitaria, y por otro lado en el abordaje de las adicciones mediante la gestión para la construcción de la Casa Educativa Terapéutica en barrio San Benito.
Asimismo, en ese último tramo como intendente, Isa inauguró un refugio para perros callejeros que constaba de 70 caniles. Al poco tiempo de ser inaugurado, los empleados del lugar denunciaron la falta de condiciones mínimas para abastecer a los animales, tales como agua corriente en todos los habitáculos, o carencia de un tendido de luminaria óptimo.
Evidentemente, dados los resultados de la encuesta de El Tribuno, los baches no pudieron ser erradicados antes que Isa emigrara al Ejecutivo provincial, por lo que ese será uno de los ejes que asechen a la gestión de Sáenz. El estado de las calles es una imposición en la agenda, tanto por el influjo discursivo de Isa en su postrimero período como por la propia exigencia de los vecinos.
Su impronta
Sáenz empezó haciendo cambios en el gabinete municipal, entre los cuales se destaca el desdoblamiento de la exSecretaría de Obras Públicas, Ambiente y Servicios Públicos, que se divide en la Secretaría de Obras Públicas y Planificación Urbana, bajo la tutela de la arquitecta Beatríz Blanco, y la Secretaría de Ambiente y Servicios Públicos, titularizada por el ingeniero Federico Casas.
De esta manera, la responsabilidad en materia de pavimentaciones, repavimentaciones y bacheos quedará como una de las prioridades exclusivas de la dependencia municipal encabezada por Blanco, que a su vez, absorbió la exSecretaría de Planificación Urbana. Mientras que otras tareas, como la limpieza de canales o el desmalezamiento, pasarán a ser propiedad de la repartición dirigida por Casas.
La otra modificación resonante fue la creación de la Secretaría de Modernización, a cargo de Martín Güemes.
Según se ha descripto desde la gestión, esta área estaría apuntada a crear mecanismos para optimizar la eficiencia y la eficacia de las acciones de gobierno. Asimismo, como parte de particularidades de esta gestión, el presupuesto permite anticipar que no se ampliará la planta de trabajadores municipales.