Los vecinos del barrio El Palenque ya está cansados por el estado de las calles. No pueden entrar ni salir del lugar.
La enorme cantidad de lluvias y la falta de obras hacen que todas las calles estén convertidas en un verdadero lodazal.
En realidad, las huellas aptas para vehículos doble tracción también están los barrios El Circulo I y IV, Los Gremios y El Palenque; todos ubicados en la margen norte de la ruta 26.
Como en un Macondo, los vecinos no pueden circular por las calles onduladas, agrietadas y perforadas, llenas de agua y barro. La gente vive con botas de gomas y ni las bicicletas pueden circular.
El Palenque es un barrio de 10 manzanas en donde todos tienen problemas con sus calles.
Los vecinos dialogaron con El Tribuno y contaron que la gente de Obras Públicas de la Municipalidad ya fue a visitarlos hace dos semanas. Les prometieron que una máquina nivelaría las calles y luego las enripiarían. Es más, desde el intransigente parte oficial el secretario del área, Hugo Sumaria, dijo que esta semana comenzarían lo arreglos.
Sin embargo nada de eso sucedió hasta ahora. Para dar un parte del estado de situación, anoche hasta el cierre de esta edición, los vecinos estaban deliberando la realización de un corte en la ruta 26.
"No podemos mandar a nuestros chicos a la escuela porque llegan sucios y mojados", dijo Gabriela.
Otro vecino dijo que todo se volvió inseguro porque los móviles de la comisaría de San Remo no pueden entrar. "Ni las ambulancias entran para las emergencias de salud", dijo
El conflicto también viene por la situación irregular de venta de los lotes del barrio.
Una vecinas dijo que no tienen ni un boleto de compra venta, aunque están pagando desde hace más de 11 años.
Es decir que, en realidad esas tierras figuran como Finca La Paz o Finca La Isla, por lo que la Municipalidad tampoco puede meterse en una propiedad privada para arreglar las calles.
Es por esa misma situación que tampoco tienen teléfonos, ni internet. Además el alumbrado público y las cloacas se distribuyen irregularmente.
A los terrenos se los vendió Roberto Robles y hasta ahora no pudieron regularizar la situación de dominio. Para dar un ejemplo, a muchos de los vecinos les aprobaron los créditos de Nación Procrear, pero como no tienen los lotes a su nombre no pudieron acceder al beneficio.