Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
La diputada nacional de Unión PRO Patricia Bullrich visitó la provincia para apoyar a los candidatos de su partido en Salta. Además, participó de una mesa debate con mujeres para charlar sobre uno de los temas que más preocupan a los salteños: la violencia de género.
En diálogo con El Tribuno, Bullrich aseguró que el PRO representa el modelo de desarrollo e inversión que la Argentina necesita. También expuso su opinión sobre diversos temas, como el voto electrónico, la violencia de género, la trata de personas y el narcotráfico.
¿Cómo toma el tema del narcotráfico en la frontera?
A mí me parece que es muy preocupante, sobre todo porque el Gobierno no se da cuenta, y eso es lo que más me preocupa. Además, hay que saber que estos tipos de redes, que están asociadas con el narcotráfico, crecen como yuyo. Basta con ver la ciudad de Rosario. Hoy la Argentina es el único país que tiene una frontera vulnerable, por lo menos de los países que rodean al mayor productor de coca, que es Bolivia. La salida más segura para la coca boliviana es la Argentina. Las demás fronteras están radarizadas, más protegidas. Esta situación de colador que vive nuestra frontera hace que eso genere todo un mecanismo de traslado que cada vez se profundiza más.
Salta es una de las provincias con más alto índice de femicidios en el país. ¿Cómo hay que trabajar con esa problemática?
En Salta estuvimos discutiendo mucho sobre ese tema y hablamos de lo que han sido los cambios culturales en la sociedad. Desde la necesidad de tener políticas preventivas educativas a tener un lugar donde la mujer pueda acudir en caso de vivir un caso de violencia. Tienen que haber espacios donde la mujer pueda ir, espacios de atención psicológica, para ellas y los hijos de esas mujeres que en muchos casos también son víctimas de violencia. Además, tiene que existir la alerta temprana.
¿Argentina es pionera en cuanto a leyes que protegen a las mujeres?
Hoy las leyes se han cambiado. La ley de femicidio está votada, las leyes de trata están y hay una ley contra la violencia de género. Pero esto es como cuando manejamos, nosotros podemos tener muchas leyes pero si la práctica social es otra, esa ley llega tarde. La ley llega cuando el hecho ya está consumado. En consecuencia, lo que nosotros creemos es que hay que crear un lugar donde la mujer pueda hacer denuncias seguras, como se ha hecho con la Policía Metropolitana.
En la charla que participó uno de los temas que discutieron fue sobre trata de personas ¿Porqué es tan difícil luchar contra esas redes?
Por que son mafias. Ganan mucha plata haciendo esto y ahora también están implicados con la droga. Son mafias que defienden fuertemente un negocio que genera mucha plata. Todas las actividades ilegales que generan mucha plata son difíciles de combatir, porque además son negocios que permiten empezar a comprar a las personas que están a cargo. Compran policías, compran protección.
¿Una mujer que es rescatada de una red de trata como debería ser contenida?
Primero hay que hacer un trabajo de apoyatura psicológica muy fuerte. Porque se someten a relaciones de mucho sometimiento. Entonces hay que hacer un tratamiento psicológico que permita reubicarse como un ser humano con libertad y no sometido. Es fundamental que existan lugares donde las puedan tratar con buena contención psicológica, que revalorice esa mujer y que le permita comprender que tiene una vida por delante.
¿Qué es lo que se hizo con la Policía Metropolitana?
Todos los agentes de la fuerza están preparados para asistir a víctimas de violencia de género. Cuando reciben una denuncia no la toman a la chacota.
Si el PRO llega a ganar en las elecciones generales de octubre, ¿qué cambios va a proponer?
En primer lugar, nosotros consideramos que hemos tenido una década en la que se ha planteado un modelo populista y autoritario, en el que se han dilapidado años muy importantes de la Argentina, cuando el país tenía grandes precios en los commodities. Hoy tenemos alta inflación, déficit energético, problemas de competitividad en nuestras industrias, desempleo encubierto y una gran parte de la población dependiente de programas sociales. En este escenario, lo que nosotros planteamos es un modelo de desarrollo y de inversión. Un modelo de país en el que haya empleo con productividad y competitividad. Eso es generar confianza, generar un Estado fuerte, pero también un Estado limpio y transparente. Es generar una condición en la que todas estas trabas, impuestos altos y tensiones en diversos sectores se empiecen a acomodar a un país que pueda realzar la produc- ción.
En ese escenario que usted plantea, ¿cuál es el problema impostergable que tiene que resolver Argentina y tiene que ser tratado con urgencia?
El problema más urgente que tiene Argentina es el problema de la inclusión. Hay millones de argentinos que están viviendo con planes sociales, que están viviendo con salarios bajísimos y en condiciones de mucha precariedad. Ese es el tema más fuerte que nosotros tenemos. La inclusión es el tema más importante.
El próximo domingo hay elecciones generales en Salta y hay una fuerte discusión en torno al voto electrónico, ¿tiene alguna opinión sobre su utilización?
Desde que llegué me han bombardeado con este tema. Evidentemente acá hubo una especie de desprestigio en el voto electrónico, hay desconfianza. Como politóloga, te puedo decir que cualquier sistema electoral parte de un solo concepto, que es la confianza. Cuando el sistema tiene desconfianza; o todos los actores se ponen de acuerdo, lo revisan y ven que es lo que está pasando o lo cambian. Sino, lo que va a pasar el 17 de mayo es que se va a generar más desconfianza. Entonces, mi idea es que en estas elecciones haya una relegitimación. Para eso deberían llamar a todos los partidos políticos que participan, que todos tengan acceso al código fuente del sistema y todos puedan auditar el sistema para demostrar que es confiable. De no ser así va a haber problemas de nuevo, porque el sistema pasó de ser un sistema de confianza a ser uno de desconfianza.
En diálogo con El Tribuno, Bullrich aseguró que el PRO representa el modelo de desarrollo e inversión que la Argentina necesita. También expuso su opinión sobre diversos temas, como el voto electrónico, la violencia de género, la trata de personas y el narcotráfico.
¿Cómo toma el tema del narcotráfico en la frontera?
A mí me parece que es muy preocupante, sobre todo porque el Gobierno no se da cuenta, y eso es lo que más me preocupa. Además, hay que saber que estos tipos de redes, que están asociadas con el narcotráfico, crecen como yuyo. Basta con ver la ciudad de Rosario. Hoy la Argentina es el único país que tiene una frontera vulnerable, por lo menos de los países que rodean al mayor productor de coca, que es Bolivia. La salida más segura para la coca boliviana es la Argentina. Las demás fronteras están radarizadas, más protegidas. Esta situación de colador que vive nuestra frontera hace que eso genere todo un mecanismo de traslado que cada vez se profundiza más.
Salta es una de las provincias con más alto índice de femicidios en el país. ¿Cómo hay que trabajar con esa problemática?
En Salta estuvimos discutiendo mucho sobre ese tema y hablamos de lo que han sido los cambios culturales en la sociedad. Desde la necesidad de tener políticas preventivas educativas a tener un lugar donde la mujer pueda acudir en caso de vivir un caso de violencia. Tienen que haber espacios donde la mujer pueda ir, espacios de atención psicológica, para ellas y los hijos de esas mujeres que en muchos casos también son víctimas de violencia. Además, tiene que existir la alerta temprana.
¿Argentina es pionera en cuanto a leyes que protegen a las mujeres?
Hoy las leyes se han cambiado. La ley de femicidio está votada, las leyes de trata están y hay una ley contra la violencia de género. Pero esto es como cuando manejamos, nosotros podemos tener muchas leyes pero si la práctica social es otra, esa ley llega tarde. La ley llega cuando el hecho ya está consumado. En consecuencia, lo que nosotros creemos es que hay que crear un lugar donde la mujer pueda hacer denuncias seguras, como se ha hecho con la Policía Metropolitana.
En la charla que participó uno de los temas que discutieron fue sobre trata de personas ¿Porqué es tan difícil luchar contra esas redes?
Por que son mafias. Ganan mucha plata haciendo esto y ahora también están implicados con la droga. Son mafias que defienden fuertemente un negocio que genera mucha plata. Todas las actividades ilegales que generan mucha plata son difíciles de combatir, porque además son negocios que permiten empezar a comprar a las personas que están a cargo. Compran policías, compran protección.
¿Una mujer que es rescatada de una red de trata como debería ser contenida?
Primero hay que hacer un trabajo de apoyatura psicológica muy fuerte. Porque se someten a relaciones de mucho sometimiento. Entonces hay que hacer un tratamiento psicológico que permita reubicarse como un ser humano con libertad y no sometido. Es fundamental que existan lugares donde las puedan tratar con buena contención psicológica, que revalorice esa mujer y que le permita comprender que tiene una vida por delante.
¿Qué es lo que se hizo con la Policía Metropolitana?
Todos los agentes de la fuerza están preparados para asistir a víctimas de violencia de género. Cuando reciben una denuncia no la toman a la chacota.
Si el PRO llega a ganar en las elecciones generales de octubre, ¿qué cambios va a proponer?
En primer lugar, nosotros consideramos que hemos tenido una década en la que se ha planteado un modelo populista y autoritario, en el que se han dilapidado años muy importantes de la Argentina, cuando el país tenía grandes precios en los commodities. Hoy tenemos alta inflación, déficit energético, problemas de competitividad en nuestras industrias, desempleo encubierto y una gran parte de la población dependiente de programas sociales. En este escenario, lo que nosotros planteamos es un modelo de desarrollo y de inversión. Un modelo de país en el que haya empleo con productividad y competitividad. Eso es generar confianza, generar un Estado fuerte, pero también un Estado limpio y transparente. Es generar una condición en la que todas estas trabas, impuestos altos y tensiones en diversos sectores se empiecen a acomodar a un país que pueda realzar la produc- ción.
En ese escenario que usted plantea, ¿cuál es el problema impostergable que tiene que resolver Argentina y tiene que ser tratado con urgencia?
El problema más urgente que tiene Argentina es el problema de la inclusión. Hay millones de argentinos que están viviendo con planes sociales, que están viviendo con salarios bajísimos y en condiciones de mucha precariedad. Ese es el tema más fuerte que nosotros tenemos. La inclusión es el tema más importante.
El próximo domingo hay elecciones generales en Salta y hay una fuerte discusión en torno al voto electrónico, ¿tiene alguna opinión sobre su utilización?
Desde que llegué me han bombardeado con este tema. Evidentemente acá hubo una especie de desprestigio en el voto electrónico, hay desconfianza. Como politóloga, te puedo decir que cualquier sistema electoral parte de un solo concepto, que es la confianza. Cuando el sistema tiene desconfianza; o todos los actores se ponen de acuerdo, lo revisan y ven que es lo que está pasando o lo cambian. Sino, lo que va a pasar el 17 de mayo es que se va a generar más desconfianza. Entonces, mi idea es que en estas elecciones haya una relegitimación. Para eso deberían llamar a todos los partidos políticos que participan, que todos tengan acceso al código fuente del sistema y todos puedan auditar el sistema para demostrar que es confiable. De no ser así va a haber problemas de nuevo, porque el sistema pasó de ser un sistema de confianza a ser uno de desconfianza.
PUBLICIDAD