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Hartos de los hechos delictivos, vecinos de la zona norte de la ciudad convocaron a una reunión a todos sus pares para plantear esta situación a las autoridades policiales y legisladores del departamento, a los que invitaron previamente.
En la misma expusieron la notoria falta de personal para la Comisaría 24 y la imperiosa necesidad de contar con más móviles para el patrullaje, además de la necesidad de instalar cámaras de seguridad en todo el sector.
En un petitorio a los legisladores provinciales, solicitaron que gestionen a nivel provincial la designación de más personal policial, y la implementación de proyectos para descomprimir las comisarías, al mismo tiempo que la incorporación de personal civil en la administración de la policía.
A los concejales, por su parte, le pidieron que intimen al ingenio a limpiar los canales que limitan con el barrio y a desmontar a los alrededores ya que en los matorrales se ocultan los delincuentes, además el acondicionamiento de las calles y del alumbrado público a los responsables de la Municipalidad local.
La reunión se llevó a cabo días pasados en la plazoleta del barrio, porque los vecinos sienten que la fuerza de seguridad provincial no solo no tiene el recursos ni materiales para cumplir con la demanda, a pesar de que cuentan con una comisaría instalada en el barrio.
Numerosos pedidos
Los vecinos insistieron en que las autoridades gestionen el aumento de personal policial, la colocación de cámaras de seguridad ante el incremento de los hechos de inseguridad en este último tiempo.
Expresaron que es imprescindible que los móviles recorran calles y pasajes, en diferentes horarios, para marcar presencia y de esa forma resguardar el jardín de infantes y la cancha existente en el sector, donde siempre hay jóvenes consumiendo alguna sustancia prohibida o por lo menos botellas de bebidas alcohólicas.
"Es una situación violenta para nuestros niños pequeños, que son muchas veces testigos de conductas violentas, peleas, pedradas a viviendas particulares, correteadas y gritos", exprés una madre visiblemente preocupada por la situación.
Posibles desbordes
"Estamos muy preocupados pensando que en cualquier momento esta situación se puede desbordar y tengamos que lamentar víctimas fatales"", dijo un docente que vive en el barrio.
Los habitantes del barrio expresaron que se sienten totalmente desprotegidos, "cada vez que llamamos al 911 la mayoría de las veces no envían a nadie o llegan demasiado tarde. Nuestro barrio limita con el cañaveral, el cementerio, un canchón de un aserradero y la ruta, por lo que geográficamente es una zona de riesgo, dado que estamos aislados por los cuatro puntos cardinales", agregó la mujer.
"Presos de la inseguridad"
Por su parte, la presidenta del barrio Los Lapachos, Valeria Orozco, dijo que "vivimos presos de la inseguridad y de los adictos", quien además contó que en los últimos hechos registrados no solo se destacan robos en las calles o viviendas, sino también robos de ruedas y baterías de los autos.
"Se escuchan tiros y gritos de noche, vienen chicos adictos de otros barrios y se enfrentan con los de aquí, las peleas entre patotas nunca faltan", manifestó.
El barrio ubicado en zona norte de la ciudad de Orán comprende las calles Saavedra, Bichara, San Martín y Lamadrid.
La cúpula policial presente se comprometió a elevar el reclamo al Ministerio de Seguridad para ir brindando respuestas paulatinamente.