inicia sesión o regístrate.
“El auténtico diálogo social supone la capacidad de respetar el punto de vista del otro aceptando la posibilidad de que encierre algunas convicciones o intereses legítimos”. (Papa Francisco, Fratelli Tutti 203).
Ante la difícil situación, por todos conocida, que atraviesa nuestra Provincia por la prolongación del conflicto de nuestros trabajadores de la educación, como Iglesia diocesana manifestamos nuestra preocupación, cercanía, solidaridad y el llamado profundo a que se pongan los medios necesarios para la resolución de esta tensionante situación y que viene alargándose durante muchos días.
Nos preocupan los trabajadores y sus familias, los primeros afectados por este extenso conflicto a muchos de los cuales la pandemia afectó gravemente. Como así también, la situación educativa de tantos niños y niñas sin tener garantizado el derecho a la educación.
Creemos que es apremiante y posible generar un espacio para el encuentro y el diálogo, lo que supone la escucha atenta, respetuosa, honesta, abierta a la búsqueda del bien de todos. Vemos que la problemática en la que nos encontramos agudiza aún más la ya compleja realidad social que nos toca vivir, agrava las muchas heridas del cuerpo social de nuestra región, entre las que sobresale el desempleo.
Constatamos y valoramos los esfuerzos realizados desde el inicio del conflicto por muchos de los actores involucrados en la situación, quienes con más buena voluntad que poder de decisión intentaron con insistencia tender puentes.
En el marco de días tan caros a nuestra fe cristiana como son el tiempo del Milagro, de nuestras fiestas patronales en honor a San Ramón Nonato como así también las fiestas fundacionales, suplicamos a Dios que inspire a quienes tienen bajo su responsabilidad la educación en nuestra provincia y se llegue en la mayor brevedad posible a la solución de este conflicto.
De esta manera se evitará que sigan aumentando los costos sociales, familiares, personales y económicos.
Ruego a los líderes sociales y a las autoridades gubernamentales que no dejen de dialogar, que tengan siempre presente el horizonte del bien común, que no pierdan de vista el presente y el futuro de nuestros niños y jóvenes.
Así se dará un importante paso en la construcción de la tan necesaria paz y amistad social. ¡Paz y Bien!
Fray Luis Antonio Scozzina OFM - Obispo de la Nueva Orán - San Ramón de la Nueva Orán, 20 de agosto de 2021