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El filipino Manny Pacquiao, en su regreso al boxeo tras dos años, perdió anoche con el cubano Yordenis Ugás por decisión unánime y no pudo reconquistar el título welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) tras 12 asaltos en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Estados Unidos.
La pelea arrancó bien para PacMan, hilvanando buenas combinaciones que dejaban descolocado al cubano y exigía a su defensa. No obstante, Ugás no se dejaba amedrentar por la experiencia del filipino y respondió de buena manera en el segundo asalto, buscando constantemente lastimarlo en la zona del abdomen.
A medida que avanzaban los rounds, ambos pugilistas comenzaron a arriesgar más en el golpe a golpe pero muy pocos de los puñetazos que se largaron llegaban a dañar de manera considerable a su rival.
Pacquiao buscaba una apertura en la defensa del cubano combinando jabs y uppercuts, mientras que Ugás aprovechaba su altura y alcance para mantener distancia y contraatacar con cross de derecha al cuerpo del filipino.
Pasada la mitad de la pelea, el defensor del título AMB comenzó a encontrarle el ritmo a Pacquiao y lo aventajó al poder conectar constantemente golpes con su mano derecha.
El filipino sintió el tiempo alejado de los cuadriláteros y sentía que la pelea se le estaba saliendo de control. El físico ya no le permitía arremeter con potencia y Ugás solo estaba a la expectativa de lo que hacía su rival.
Luego del décimo round, Pacquiao comenzó a exponerse mucho más con la intención de conectar un golpe que le permita noquear al cubano. Pero Yordenis no entró en el juego del filipino y aprovechó esa urgencia para seguir lastimando con contraataques.
Finalmente no hubo nocaut, pero los jueces no sucumbieron ante la presión de la fama del boxeador legendario filipino y le dieron el triunfo a Ugás por decisión unánime.