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El lema principal de las proteccionistas es "no rendirse y luchar hasta el final" con cada animalito que rescatan, y es justamente gracias a esa entrega incondicional, que muchos de los rescatados logran sobrevivir y recuperar la alegría, a pesar de haber vivido un infierno.
La perrita Keyla es uno de los ejemplos donde quedó demostrado que además de los cuidados veterinarios, el amor y la buena energía tienen una influencia poderosa. Hace más de cinco meses, cuando fue rescatada por la proteccionista Patitas Callejeras, su estado de salud era realmente crítico y su probabilidad de vida era casi nula. Sin embargo, la proteccionista no se rindió, la lucha de Keyla se viralizó en las redes sociales y transcendió fronteras. La historia también conmovió a la comunidad rosarina, que no dudó en colaborar para el tratamiento de quimioterapia, incluso, una vecina ofreció a su perrito para que le donara sangre.
Desde Patitas Callejeras relataron: "A Keyla la hemos rescatado el 31 de julio de este año, cuando varios vecinos nos dieron aviso que una perrita deambulada sin rumbo por la avenida Palau. Le dimos alimento, pero no quería comer, estaba piel y huesos por la sarna, caminaba con mucha dificultad y tampoco quería que nos acercáramos, la verdad es que tenía la mirada triste y perdida".
En cuanto al diagnóstico, contaron: "Tenía un tumor de sticker, que es un cáncer que se da por transmisión sexual, del tamaño de una naranja, y al ser una perrita muy pequeña, la situación era muy complicada.
A los días descubrimos que tenía varios tumores mamarios, además tenía sarna, desnutrición y hasta le habían quemado la piel con aceite. Al no querer comer, le hicieron análisis y se detectó que tenía la enfermedad de Ehrlichia o el llamado 'mal de la garrapata', y ese parásito le estaba provocando una disfunción en su medula ósea, es decir que estaba con un principio de leucemia".
Ringo donó sangre
La sangre de Ringo, un perro de grandes dimensiones, ayudó a Keyla a mejorar. Desde la proteccionista dijeron: "Con tres tipos de cáncer y otras enfermedades, Keyla tenía todo el cuadro en contra y no tenía esperanza de vida. Para nosotras era una situación muy triste porque veíamos que pasaban los días y no mejoraba, hasta que un día nos vimos en la encrucijada de tener que arriesgarnos con una transfusión de sangre y afortunadamente esa sangre que recibió del perrito de una vecina, Fernanda, hizo el milagro. Al día siguiente de la transfusión por fin empezó a comer y se levantó por primera vez, ya que ni siquiera se podía levantar".
Publicación viral
Luego de asistir a Keyla las proteccionistas informaron su estado en las redes sociales y rápidamente la noticia se viralizó y llegó hasta México y Estados Unidos.
"Gracias a la publicación que hicimos en las redes pudimos conseguir un lugar provisorio para poder tenerla mientras recibía la atención veterinaria, es así que un matrimonio de chicos jóvenes, Jesi y Michel, se ofreció a cuidarla hasta su recuperación y posterior adopción", señaló.
"Es importante agradecer a toda la comunidad rosarina, porque gracias a toda esa ayuda que recibió, ya que fue un tratamiento muy costoso, pudo recuperarse. Muchos vecinos han estado pendientes de su evolución y eso es algo muy destacable", aseveró.
Tratamientos
Una vez que la perrita reaccionó con la transfusión comenzó con varios tratamientos, entre ellos las quimioterapias.
"Fue sorteando todos y cada uno de los controles veterinarios y la verdad que fue muy emocionante ver cómo iba recuperando su vida y su salud. Después que superó la anemia y le dieron el alta del cáncer, pudo ser castrada y le extirparon varios tumores mamarios", indicaron desde Patitas Callejeras.
Finalmente, destacaron que "fueron cinco meses de lucha y sinceramente, para nosotras como proteccionistas es una caso muy significativo; una por la relevancia que tomó Keyla, ya que hubo gente que nos escribía desde Estados Unidos y México, donde se viralizó su caso, además, muchos nos decían que era mejor 'hacerla dormir', pero uno de los principios que tenemos como grupo es que siempre que rescatamos un animalito hay que luchar hasta el final. Para la veterinaria que la asistió también fue algo novedoso, ya que es el primer caso de una perrita que tenía los días o las horas contadas, sin embargo ya está recuperada y lista para irse en adopción".