El pasado 19 de noviembre, la Sede Regional Sur de la Universidad Nacional de Salta, con asiento en la ciudad de Metán, cumplió cincuenta años de vida y al parecer, nadie recordó tan importante logro.
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El pasado 19 de noviembre, la Sede Regional Sur de la Universidad Nacional de Salta, con asiento en la ciudad de Metán, cumplió cincuenta años de vida y al parecer, nadie recordó tan importante logro.
La Sede nació por resolución del Consejo Superior de la casa de altos estudios que por entonces presidia el rector, Dr. Holver Martínez Borelli. Su jurisdicción comprendía además de Metán, los departamentos de Rosario de la Frontera, La Candelaria y Anta.
La decisión causó cierta polémica ya que desde hacía un tiempo, los vecinos de Metán y Rosario de la Frontera venían trabajando para ganar un lugar en la estructura de la flamante Universidad Nacional de Salta. En ambos departamentos se habían constituido oportunamente comisiones integradas por "las más caracterizadas personalidades" representativas de casi la totalidad de las instituciones públicas y privadas", según un diario local. Y tanto una ciudad como la otra, habían presentado sus postulaciones esgrimiendo sólidos fundamentos, además de haber obtenido numerosas entrevistas con autoridades de distintos niveles, tanto provinciales como nacionales.
En el caso de Rosario, la "Comisión para el Desarrollo de Rosario de la Frontera" había logrado con mucho esfuerzo, un amplio consenso a favor de la casa universitaria. Y más aún, había conseguido la donación de 25 hectáreas para la construcción de la futura Sede Sur de la UNSa, predio que en 1973 lo había visitado el entonces ministro de Educación de la Nación, doctor Jorge Alberto Taiana.
En cuanto a Metán, allí también los vecinos habían constituido una "Comisión Ejecutiva Promotora" que la integraron Evelio Melián, Guillermo Díaz, doctora Elsa Ovejero de Paseyro, Raúl Valdez, Miguel Rosas, Elsa Avalláy, Miguel Angel Acuña, Alberto Cugat, Angel González, Raúl Vaca, Héctor Varela, José Rodríguez Alonso, Mario Poma, Vilma Vera, Otilio Miy, Alberto Godoy y Raúl Oscar López.
A poco de andar, esta comisión también había logrado valiosas donaciones para la futura casa universitaria de Metán. Así por ejemplo, el doctor José Rodríguez Alonso cedió 10 hectáreas y otro tanto había hecho el señor Mario Poma, quien aportó ocho hectáreas colindantes con las del Rodríguez Alonso. Y a ello se sumó la cesión, también gratuita, de la firma Modelel Hermanos. Era esta una importante fracción de 50 metros de ancho por 200 de largo para que desde la RN34 se pudiese acceder al futuro complejo universitario. Todos estos terrenos, según detalles brindados por la prensa de entonces, estaban ubicados en el perímetro del exParque Zoológico, en la prolongación de las calles General Güemes y Alem.
El Galpón
Pero la Comisión de Metán no solo desarrolló su labor en el radio urbano de la ciudad sino que también lo hizo en otras localidades del departamento. Así fue que en octubre de 1974, Alberto Cugat, Raúl Valdez, Evelio Melián y el doctor Arturo Espeche Funes, organizaron una reunión en la Escuela de Comercio "San Francisco Solano" de El Galpón. De ella participaron autoridades municipales, legisladores departamentales, docentes y público en general. El resultado fue la constitución de una comisión de apoyo que quedó integrada por los vecinos Macelo Giménez, el ingeniero Rodolfo Clérico, Enrique Novoa, Angel Joaquín, José Benito Caram, Elio del Valle Casas, y el estudiante Enrique Berzero.
Días después los comisionados metanenses cumplieron idéntico trámite en Joaquín V. Gonzalez, cabecera del departamento de Anta. Allí también los vecinos conformaron otra comisión de apoyo aunque lamentablemente, la nómina de sus integrantes no figura al igual que la de La Candelaria.
La decisión
Y así, entre trámites y gestiones realizadas por las comisiones de ambos departamentos en puja, se arribó a una fecha clave: el 19 de noviembre de 1974. Ese día el Consejo Superior de la UNSa presidido por el rector Martínez Borelli, definió, luego de estudios realizados por comisiones técnicas, la ubicación de la Sede Sur. Y así fue que en horas de la tarde, en un todo de acuerdo con las prerrogativas establecidas por la Ley 20.654-73, el Consejo Superior resolvió designar a la ciudad de Metán, asiento de la Dirección de la Sede Regional Sur de la Universidad Nacional de Salta. En su artículo segundo la resolución establece que en 30 días se debía constituir la Comisión que implementaría los estudios para su futuro funcionamiento.
Finalmente, se designó como primer director de la mencionada Sede Regional, al doctor Arturo Espeche Funes. Esa misma noche, las autoridades de la Universidad comunicaron lo resuelto a las juntas promotoras de ambos departamentos como así también a sus respectivas autoridades municipales. Hicieron saber que al día siguiente -20 de noviembre- el Dr. Espeche Funes sería posicionado en su cargo en un acto a realizarse por la tarde en la comuna metanense. Como es de imaginar, en Metán, la noticia fue recibida con gran alborozo pero en Rosario de la Frontera, la reacción no se hizo esperar y el rector Martínez Borelli fue declarado persona no grata.
La recepción
A media tarde del 20 de noviembre, las autoridades de la Universidad encabezadas por el rector Martínez Borelli arribaron a Metán. Lo acompañaban los secretarios académicos Rafael González y Víctor Giménez, el licenciado Carlos Arredondo, los directores de los Departamento de Ciencias Económicas, CPN Ramón Narciso Gallo; de Ciencias de la Educación, profesor Víctor Savoy Uriburu; de Acción Cultural, profesor Luis Saavedra y del Instituto de Desarrollo, licenciado Mario Peralta.
La comitiva universitaria fue recibida en el puente de río Conchas de la RN34 por las comisiones de apoyo de Metán, El Galpón, Joaquín V. Gonzalez, La Candelaria, estudiantes y público en general. Luego, todos en caravana se trasladaron hasta el edificio comunal donde se realizó el acto de asunción del Dr. Espeche Funes. Concluida la ceremonia, desde el balcón del edificio comunal, se dio lectura al texto de la resolución que creaba la Sede Regional Sur, ante una multitud que se había dado cita en el lugar.
Posteriormente, todas las autoridades se trasladaron hasta el predio de las 18 hectáreas donadas por el bioquímico José Rodríguez Alonso y el vecino Mario Poma. Allí, en un acto muy emotivo, los donantes hicieron entrega de las escrituras respectivas al rector, documentos por los cuales la Universidad Nacional pasaba a ser propietaria de esos solares, sitios donde en un futuro cercano, debía levantar los edificios de la Sede Regional Sur.
Premonición
"Concluidos los actos en los mencionados predios –escribe el corresponsal de El Tribuno- todos las autoridades fueron invitadas a participar de una cena. A los postres usaron de la palabra el intendente municipal don Pedro Ernesto Bernis, el profesor Evelio Melián, rector del Colegio Nacional y miembro de la comisión promotora, la estudiante Vilma Vera y el flamante director de la Sede, doctor Espeche Funes. Y para concluir, habló el rector quien dio razones sobre la decisión de elegir a Metán como la sede del sur provincial: "No ha sido –señaló- una decisión arbitraria, sino el resultado de la compulsa de la realidad social, cultural y política de la región, porque esta ciudad es el nudo convergente de todo el sur de la provincia y un terreno fértil para forjar al nuevo hombre americano". Y ya al final agregó una frase que resultó premonitoria: "Aunque éste fuera nuestro último acto, yo supongo que ustedes no permitirán que esto se borre como una cosa escrita en el agua".
Intervención
El 2 de diciembre, es decir doce días después de la inauguración de la sede sur, la Universidad Nacional de Salta fue intervenida por el gobierno nacional. De esta forma, dicha decisión fue efectivamente el último acto del rector Martínez Borelli. Pero hay algo más, luego de intervenida la Universidad, primero por el gobierno nacional y luego por las autoridades del Proceso Militar de 1976, la UNSa, nunca tomó posición de los terrenos donados tan generosamente por los vecinos metanenses. Y así fue que aquellas valiosas donaciones se borraron como si las escrituras hubiesen sido efectivamente escritas en el agua. Por cierto, esto no fue responsabilidad de los donantes que aquí recordamos con respeto y agradecimiento.
Según historiadores de Metán consultados por El Tribuno, las donaciones se habían hecho con cargos y como las obras nunca se concretaron, algunos de esos predios regresaron a sus dueños y otros fueron usurpados.
Actualmente la Sede Sur de la Universidad Nacional de Salta funciona en el edifico del exPoliclínico Ferroviario de Metán. Curiosamente, luego de cincuenta años de aquellas valiosas donaciones, luego perdidas, un proyecto de ley del diputado Sebastián Otero, vino a reparar los daños causados por la dejadez. De nuevo, la Sede Sur tiene casa propia.